Juan Carlos, médico rural: “Desarrollar nuestra vocación en este ámbito hace que sea más satisfactoria”

En COPE analizamos los problemas que se enfrente el mundo rural en cuanto a médicos se refiere, y la falta de relevo generacional

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Desde este martes, los médicos especialistas de Madrid están en huelga. Los sanitarios protestan contra la “temporalidad laboral”, que afecta a casi la mitad de estos profesionales en la región. Hablamos de problemas en materia sanitaria que se producen en una gran ciudad como Madrid, pero podríamos hablar de otras grandes capitales como Valencia, Barcelona o Bilbao.

Pero ¿qué pasa cuando hablamos de la Sanidad en el mundo rural? Cuando hablamos de poblaciones de apenas de 500 habitantes, con una edad media muy alta, y que para cualquier prueba tienen que desplazarse decenas de kilómetros, si no cientos. Esta mañana en 'Herrera en COPE’ queremos conocer cuál es la realidad de la medicina rural, de los médicos de pueblo.

Se calcula que unos 4.500 médicos rurales se retirarán en los próximos 5 años. Ahora mismo, el ritmo de jubilaciones es mayor que las incorporaciones, lo que está generando un déficit de sanitarios en los pueblos. Una situación que se nota especialmente en la España vaciada pero que tienen el mismo derecho a la sanidad que cualquier otra persona, independientemente de dónde viva. Para conocer de cerca la situación, vamos a ir a Castilla y León, Aragón y Navarra.

En Velilla de San Sebastián, Soria, nos encontramos con Manolo. Manolo tiene 79 años y ha vivido aquí durante toda su vida, pero durante los últimos dos años no ha tenido asistencia sanitaria. El centro de salud está cerrado, no tienen médico ni enfermero. En Aranda de Moncayo, un pueblo de 70 habitantes en la provincia de Zaragoza, si no llamas al autobús, no llega. El colegio tiene a todos sus alumnos en un aula. Y el banco hace mucho que se cerró... Así que imagínate ponerte malo en este municipio.

Ese es el problema. La salud y la falta de médicos. En España hay entre 11.000 y 15.000 médicos rurales. La horquilla es tan amplia porque no existe una base de datos para ver cuántos tenemos realmente. Además, tenemos que tener en cuenta la media de edad de estos médicos rurales que es muy alta, por encima de los 50 años.

Así que el problema viene ahora, cuando dentro de cinco años se jubilen un tercio de ellos; a lo que hay que añadir el agravante de que no hay sustitutos.

Aunque la situación a día de hoy ya es muy precaria, como nos cuenta Antonio, un vecino de Belver de los Montes, un pueblo de Zamora de 280 vecinos. Nos dice Antonio que “antes, los médicos, venían todos los días, pero ahora vienen cuando los llamas y pides cita”; ante esta situación este vecino confiesa que “cuando necesito algo, voy a mi médico de cabecera de Zamora”.

ASÍ ES EL DÍA A DÍA DE UN MÉDICO RURAL

El día a día de un médico rural se resume en dos palabras: coche y precariedad. Los sueldos no pagan la labor que hacen, y mucho menos cuando tienen que poner de su bolsillo la gasolina. Juan Carlos Romero, tiene 36 años, y así han sido sus últimos 7 años. Su coche tiene los mismos kilómetros que experiencias vividas. Ha estado en Aragón, en Extremadura y, ahora, en Navarra.

Confiesa este médico que “la vocación ya nace con la propia especialidad, pero el desarrollarla en un ámbito rural hace que de alguna manera sea más satisfactoria”. Aunque sí que destaca como algo negativo en desarrollar su profesión en el medio rural el tema del desplazamiento, ya que, dependiendo de los kilómetros que tengas que hacer al día y los pueblos que tienes que visitar “condiciona mucho, y más a esta edad, conciliar la vida familiar y la vida laboral”, porque “de una jornada laboral que son 8 horas” debido a los desplazamientos “se pueden convertir en 10 u 11 horas diarias”.

Para Juan Carlos la razón fundamental de que no haya relevo generacional es “la falta de incentivos” asegurando que no se trata “sólo de incentivos económicos sino como el poder disponer de pruebas complementarias, de medios, de diagnósticos que permitan al médicos, a la enfermera de atención primaria poder gestionar a esos pacientes que haga que sea atractiva una plaza en un determinado lugar aun cuando esté a 150-200 kilómetros de distancia”, sin olvidar, tampoco “de incentivar aquellas zonas de difícil cobertura con algún otro tipo de incentivo económico”.

Por último, subraya que “la razón de ser de los médicos en el mundo rural es garantizar la continuidad a nuestros pacientes, que es lo que genera valor para nuestro sistema sanitario” destacando que “los vínculos que creamos con nuestros paciente resuelven más y reducen más la mortalidad que cualquier otro medio o diagnóstico”.

Sin embargo, también nos encontramos con otras zonas en las que no hay ningún tipo de problema. Por ejemplo, en Larraintzar, un pueblo de 80 habitantes en Navarra, donde Amparo dice “no tener queja alguna en esta zona porque me atienden en el momento”. En concreto, tienen “pediatras tres días a la semana y también hay enfermeras”.

MEDIDAS PARA ATRAER MÉDICOS AL MUNDO RURAL

La Organización Médica Colegial ha revelado que la desaparición de este tipo de medicina está más cerca de lo que se piensa, y mucho más si no se hace nada al respecto. Por eso, Ángel López, médico rural en la provincia de Sevilla concreta algunas de las cosas que podrían llevarse a cabo para que los médicos acepten trabajos rurales “todos los médicos de familia, incluso los médicos de otras especialidades, roten un mínimo de tres meses por los pueblos, y después, incentivar en los sitios, por ejemplo, de difícil cobertura con mejoras en cuanto a trabajos para parejas, colegio para los niños, desplazamientos…”. Para este médico es “la única forma de que un médico joven decida irse a una zona rural”.

Además, Ángel ensalza los beneficios de la medicina rural, de la medicina de los pueblos que es “mucho más reconfortante, de agradecimientos, de sentimientos, de miradas… es una medicina cercana a nuestros paciente”.