¿Qué es el hidrógeno verde? ¿Cómo se obtiene y en qué podemos utilizarlo? La apuesta de España ante el gas
La investigadora Beatriz Roldán despeja en COPE todas las dudas que tenemos del hidrógeno verde
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Finalmente, Pedro Sánchez ha cedido ante el presidente francés Emmanuel Macron y ha renunciado al MidCat para poner en marcha otro proyecto denominado BarMar.
Un acuerdo al que ha llegado el presidente de España junto a Macron y Antonio Costa, presidente portugués, en el que se llevará acabo cabo un nuevo corredor de energía que conectará España con el resto de Europa a través de un ducto que una Barcelona con Marsella por el que se transportará hidrógeno verde, son muchas las preguntas que nos hacemos sobre este tipo de energía.
Por eso, en ‘Herrera en COPE’ resolvemos todas tus dudas con Beatriz Roldán, investigadora en Alemania de alternativas energéticas.
¿Qué es el hidrógeno verde?
Como nos explica Roldán, el hidrógeno verde “se obtiene del agua. El agua es una molécula que está compuesta de hidrógeno y oxígeno. El oxígeno es lo que respiramos, y el hidrógeno que vamos a poder utilizar como energía del futuro”.
¿Cómo se obtiene?
“Hay que disociar el agua”, así es como se obtiene el hidrógeno verde. Y ¿cómo se hace? “Disociar el agua quiere decir, partirlo”, matiza la investigadora, que continúa explicando “y eso se hace con electricidad”.
“Esa electricidad la podemos obtener de energías renovables, por ejemplo, de energía solar o de energía que obtenemos a través del viento. Y la idea es usar esa energía renovable es que muchas veces no la podemos acumular porque hay periodos que se obtienen por exceso y otros periodos en los que no se obtienen bastante, por lo que podríamos usar ese exceso de energía para disociar el agua y obtener ese hidrógeno verde”.
Cómo se transporta el hidrógeno verde y cómo se usa para obtener energía
Sin embargo, Beatriz Roldán advierte de que “el hidrógeno tiene una densidad energética muy baja, lo que quiere decir que como gas no se puede usar muy bien como fuente energética”.
Por ese motivo, cuenta la investigadora que “lo que tenemos que hacer es: primero, o ponerlo bajo presión o enfriarlo para convertirlo en líquido y así poder transportarlo más fácilmente y utilizarlo”. Pero en este último caso, hay un problema ya que “no es fácil enfriar el hidrógeno porque hay que hacerlo a temperatura muy baja”.
Ante esta dificultad, una de las opciones que se llevan a cabo es “convertirlo en otra cosa, en este caso en amoniaco”.
“Para convertir el hidrógeno en amoniaco necesitamos un material que se llama catalizador que permite que se produzca una reacción química más fácil de lo que tendríamos si no tuviésemos ese material, baja la energía que necesitamos para convertir el hidrógeno en amoniaco”.
Eso sí, señala Roldán que “si lo queremos usar, tenemos que volver a convertirlo en hidrógeno”.
¿Cuál es el uso del hidrógeno verde?
Una vez que el hidrógeno verde ya ha sido transportado y convertido podemos “quemarlo, obtener productos químicos (combustibles) si lo combinamos con el dióxido de carbono, y obtener fertilizantes u otros productos químicos si lo unimos al nitrógeno”.
Destaca la investigadora que de esta manera “minimizamos el efecto invernadero”.