El socialista Antonio M. Carmona: "Me consta la oposición de ministros socialistas a las tesis de Iglesias"
El que fuera candidato del PSOE a la alcaldía de Madrid considera a Iglesias “un pobre hombre con ideas que abocan al gobierno a serias contradicciones"
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Ya son casi 200.000 las firmas de apoyo al manifiesto en defensa del carácter vehicular del castellano y contra la enmienda transaccional acordada entre PSOE, Unidas Podemos, Bildu y ERC a la Ley Celaá, la reforma educativa del Gobierno, que ya se ha aprobado en el Congreso.
Una incitativa impulsada por dirigentes socialistas como Antonio Miguel Carmona, profesor de Economía y ex candidato a la alcaldía de Madrid. “Defendemos lo que propuso la ministra Celáa, que el castellano es idioma vehicular en España, algo obvio y que defendió Sánchez, al que también defiendo, pero se aprobó una enmienda independentista en la que se eliminaba que el idioma español es vehicular en España", una frase "ridícula por obvia”, ha reconocido en 'Herrera en COPE'.
El que fuera concejal reconoce que impulsó este manifiesto tras las palabras dela diputada de ERC, Montserrat Bassa, en las que que aseguraba que “con esta enmienda, los estudiantes catalanes podrían estudiar castellano como idioma extranjero, al gual que el inglés o el francés”.
Antonio Miguel Carmona señala que "no solo defienden a los castellano parlantes, también a los catalano parlantes”. Recuerda que el Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat afirma que el 37% de los catalanes habla castellano, frente a un 26% que lo hace en catalán. “Hay zonas en Cataluña donde apenas se enseña el castellano", algo que en su opinión "invalida al desarrollo profesional de los niños”.
Reconoce que la porpuesta ha encontrado 'calor' en miembros destacados de la vieja guardia socialista como Alfonso Guerra o Cándido Méndez, pero también de la nueva. “Me han llamado incluso ministros que están de acuerdo con la redacción original de Celaá”, pero lamenta la enmienda de los independentistas, "con la insana intención de convertir el español en un idioma extranjero en Cataluña”.
El socialista explica que “probablemente la enmienda sea constitucional, pero las familias no podrán recurrir cuando quieran, en su libertad de elección, dar más castellano en sus aulas". Tampoco el Estado "podrá proteger a esa decisión que ha tomado la Generalitat de luchar contra el castellano”.
En este sentido Antonio Miguel Carmona no 'entiende' que el grupo parlamentario socialista 'participara' en la elaboración de esa enmienda, “no en todo lo que dice mi partido estoy de acuerdo”. "Luchamos contra el franquismo para defender el catalán y ahora luchamos contra Torra para defender el castellano”, ha añadido.
CARTA DE SÁNCHEZ A LA MILITANCIA
Sobre la carta de Sánchez a la militancia tras el polémico pacto con Bildu, Carmona defiende que si bien “los de Bildu renuncian a la violencia, quieren liquidar la democracia española, y establecer un nuevo estado en el País Vasco". "Jamás negociaré con los nazis la destrucción de mi estado”. Una corriente que por otro lado considera “ mayoritaria” en su partido.
Señala que “algunos ministros han dicho que están negociando con Bildu, pero eso lo tiene que aclarar el propio gabinete”. “Si Bildu vota, ha habido alguna negociación, pues que se explique".
ESPAÑA, "ENVENENADA POR LAS POSICIONES MÁS RADICALES"
Por otro lado, a pesar de las "discrepancias" que mantiene con el PP reconoce que es un partido que "respeta la Constitución, que intenta salvar nuestra democracia y que este país prospere, no podemos romper desde el centro político los puentes”.
Advierte que España “se ha envenenado con las posiciones más radicales” por ello, señala “debemos lograr el triunfo de los moderados, de un bando u otro. Vox y los dirigentes de Podemos han enturbiado la política española. En mi ideal de sociedad ellos caben, en la suya, no quepo yo”.
En este sentido reconoce que Pablo Iglesias le parece “un pobre hombre -no un hombre pobre- desde el punto de vista intelectual "con ideas que abocan al Gobierno a serias contracciones”, de hecho asegura que le “consta la oposición de ministros socialistas a sus tesis".