Luis del Val: “Un niño va a una escuela concertada y sale de clase con el alma de aluminio anodizado”
Afirma el profesor que "según la sectaria Celaá a estos niños no se les ha muerto un abuelo y no han tenido que estar recluidos en casa"
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¿Íbamos a salir cambiados del confinamiento?, se pregunta en la imagen del dia en "Herrera en COPE", Luis del Val:
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"Durante estas semanas han aparecido sesudos artículos en los que se vaticinaba que de la pandemia íbamos a salir distintos. Algunos de sus autores son intelectuales conocidos, pero siempre leí esas profecías con escepticismo, porque mi modesta afición a la Historia me ha enseñado que los seres humanos, después de las guerras y las catástrofes, salen más pobres, pero no más bondadosos.
Por ejemplo, la ministra Celáa sigue igual de sectaria y, a la hora de ayudar a los niños españoles, se ha quitado de en medio al 25% de los que van a escuelas concertadas, porque según la sectaria a estos niños no se les ha muerto un abuelo, no han tenido que estar recluidos en casa, y las madres y padres de esos niños, ni ha sufrido ERTES, ni se han quedao en el paro, ni han tenido problema alguno con el confinamiento, porque ya se sabe que un niño va a una escuela concertada y al día siguiente sale de clase con el alma de aluminio anodizado.
Los países de la Unión Europea han tomado medidas para evitar la catástrofe económica del transporte aéreo, pero el ministro Ábalos dice que lo está estudiando. El ministro Ábalos es muy rápido en pedir el coche oficial y acudir raudo al aeropuerto de Barajas, aunque sea pasada la medianoche, para saludar a la vicepresidenta de la tiranía venezolana, pero es más lento que sus colegas cuando se trata de asuntos propios de su responsabilidad. No parece que haya cambiado mucho.
La extraña alianza de socialistas y comunistas pone muy nerviosos a los europeos
Tampoco ha cambiado el PSOE que, junto con Podemos, votó en Europa en contra del criterio de la mayoría de responder a la expulsión de la embajadora de la Unión Europea en Venezuela. ¡Qué tontería! Según nuestro partido en el Gobierno si el tirano la ha expulsado por algo será, y si injuria a España, afirmando que hemos participado en un complot para derribarlo, lo mejor es ser discreto, aguantarse la injuria, y no responder. Precisamente, uno de los factores que más nerviosos pone a los europeos, a la hora de conceder dinero de las ayudas a España, es la extraña alianza de socialistas y comunistas. Por eso mismo, Pedro Sánchez va a emprender una gira europea con objeto de convencer a sus colegas que lo de Podemos no es nada, que son chicos majos. Por cierto, quienes más renuentes se muestran en Europa con España, no son los conservadores colegas del PP, sino los socialdemócratas compañeros ideológicos del PSOE. Antes de la gira, votar en contra de la mayoría y apoyar a Maduro, es otro indicador de que Pedro Sánchez no ha cambiado nada.
Tampoco ha cambiado la irresponsabilidad juvenil, que ha considerado que ellos tienen bula para no ponerse la mascarilla. A no ser que sí hayan cambiado, y exista una conspiración juvenil para que vuelva la pandemia, porque hay un efecto positivo y es que, en cuanto aumentan los contagios y los muertos, se deja de hablar del prusés. ¡Qué alivio! No tener que soportar a Torra todos los días. Aún no hemos tomado aire y ya han vuelto los pelmas perpetuos con sus reivindicaciones, sus agravios, su victimismo. Y Rosa María Mateo, en su imparable degradación, pone al frente de la televisión española en Cataluña a una sectaria del nacionalismo. ¿Quién dijo que íbamos a salir cambiados?"