Abdullah e Inma, dos desconocidos refugiados en España tras huir de la guerra con el deseo de volver a su país

Abdullah e Inma se conocen desde hace poco. Comparten un café en uno de los centros de Cruz Roja en Madrid y relatan a "El Mundo" lo que les une.

Abdullah tiene 33 años y su vida corría peligro desde que los taliban entraron en Kabul y tomaron el país. Occidente huyó y dejó a los afganos a su suerte.

Había trabajado como traductor para nuestro Ejército. Intentó salir en Agosto en un avión fletado por España, pero un atentado lo impidió.

Se fue a una aldea rural para hacerse literalmente invisible a los ojos de los talibanes. En Marzo, a través de Irán, logró salir.

A Inma, de 35 años, le despertó de madrugada una amiga en su casa de Kiev. Rusia acababa de invadir su país.

Tardó dos días en atravesar la frontera de Moldavia. Enferma de cáncer, logró que su marido y sus dos hijos de 9 y 15 años también salieran de Ucrania