Unos hijos salvan a su padre, vecino de Aldaia, de las inundaciones y alucinan por lo que les dice al salir de casa: "Lo llevo aquí"
Es la 'historia del día' de María José Navarro de este viernes. En ella, rescata algunos momentos críticos de la DANA y que protagonizan mascotas
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El otro día llamó un oyente a Alberto Herrera. Se quejaba de lo poco que estábamos hablando de los animales en esta tragedia. Así que hoy será. Podríamos hablar de todos los que se han quedado también en este camino de la Dana.
Del ganado, de los perros de caza, de las fincas que son cementerios. De todos los que no han sido recogidos, a pesar de que se ha localizado a sus familias. Pero hoy es mejor contarles que hay un montón de perros llenos de barro que buscan desaparecidos. Los de la UME y la Policía.
Es mejor agradecer a todas las protectoras que se están haciendo cargo de los animales perdidos. Es mejor contarles los reencuentros.
A Rebeca, por ejemplo, se le perdió el gato. Ahora, después del susto y del regreso a casa, solo quiere estar en los brazos de su dueña.
Es mejor contarles de nuevo que los animales son muy de quedarse, de permanecer pase lo que pase. En Aldaia, un hombre fue rescatado por sus hijos después de varios días solo, entre barro y sin agua. Bueno, solo, lo que se dice solo, no estaba.
Maya, Mayita, su perrilla, estaba ahí, tapada con un abrigo de su dueño, encima de él, sin despegarse. Así que cuando le preguntaron si quería llevarse algo valioso, lo tenía clarísimo. “El oro lo llevo aquí pegado”. Y se llama Maya.
Así que hay que decirle al oyente de Alberto Herrera que no crea que nos hemos olvidado del todo.
Es que, cuando hablamos de familias, ya van incluidos sus animales.