Va a un bar, se queja de la calidad del pescado y esta es la implacable respuesta del dueño: "No me callo"

Es el testimonio de un 'fósforo' que no dejaba indiferente a los colaboradores de 'Herrera en COPE'

Alamy Stock Photo

Bar

Redacción Herrera en COPE Paola Albaladejo

Publicado el

3 min lectura

      
      
             
      

En unos 'fósforos' de 'Herrera en COPE', preguntábamos a nuestros oyentes más fieles sobre su experiencia trabajando con parejas. 

Era el caso de Nacho, que en 'Herrera en COPE' relataba que montó un negocio con su mujer. "Tengo muy mal carácter. Cuando algo se olvidaba, me enfadaba en el momento. Ya no trabajo con mi mujer. Vendimos el taller por la salud de nuestra relación y ahora nos va mucho mejor. Cada uno en su trabajo".

Goyo Jiménez aseguró que su mujer ha llegado a ser su jefa. "Nos reíamos muchísimo y nos lo pasábamos francamente bien. Funcionó", indicó. Otro oyente nos decía que era dueño de un establecimiento y contó por qué fue trending topic y lo que le respondía a un cliente de su restaurante.

Incidiendo en esta historia, Luis aseguraba que "el año pasado fui trending topic porque yo respondo las reseñas fatal. No me callo ni debajo del agua. Con mi mujer sí me callo, porque si no al llegar a casa....". Es su tercera relación.

En la primera, "pensábamos de distinta forma". El segundo caso, explicaba que era insoportable. Aprendió a decir no.

COPE Asturias

Comensales en la mesa

¿Y por qué fue trending topic? Pues lo cierto es que "respondía desde mi negocio las reseñas de la gente. Son cosas que no son normales. Una persona me preguntó que el pescado no era fresco. Le contesté mal. Cada uno, en su oficio". Descubre aquí su testimonio.

      
             
      

Rubén es el propietario de una academia de música en Granada. La lleva con su mujer. "Llevamos trabajando desde el año 2015. Nos conocimos en 2011. Por aquel entonces, yo trabajaba en una orquesta en Málaga. Se vino a vivir conmigo".

"Ahí es cuando uno se da cuenta de lo diferente que es a la pareja"

En un momento dado, se quedaron los dos sin trabajo. Así, empezaron a plantearse la posibilidad de crear algo juntos. "A través de amigos en común lo intentamos y conseguimos arrancar el proyecto. Nos va muy bien, aunque hemos pasado lo suyo. Ahí es cuando uno se da cuenta lo diferente que es a la pareja".

¿Y qué le sucedió a Jorge? "Soy técnico en emergencias sanitarias y mi pareja es la médico que trabaja conmigo. La experiencia es buena, porque en este trabajo te hace falta mucha complicidad y confianza", contaba.

      
             
      

Se preguntaba Alberto Herrera si la relación en sí se convierte en monotema. Dice que no es su caso porque "el tiempo que pasamos juntos nos parece poco. Hablamos del trabajo en casa, pero intentamos alejar un poco el mundo laboral del personal. Ella aprende de mí y yo aprendo de ella".

Oficina

La historia de María Rosario tampoco tenía desperdicio porque "yo y mi pareja somos ingenieros agrícolas y tenemos una empresa en común. Trabajamos con el agricultor directamente. Los dos somos administradores a partes iguales. Aquí mandamos los dos por igual". 

Explicaba que, habitualmente, se llevan bien. "Él es muy organizado con el trabajo y la programación, pero se pone nervioso en temas de registros telemáticos con la administración. Muchas veces acabamos a gritos".

      

Por último, recordamos el testimonio de otra oyente, llamada Ainhoa. Aseguró que tenía una frutería con su pareja en Pamplona. "Él es el dueño. Yo hago los pedidos y él los reparte después. Creamos un gran equipo, pero hay días que saltan chispas. Tenemos ideas distintas algunas veces. Como él es el jefe, a veces es 'por sus pelotas, 33'. Y yo soy muy terca, porque también formo parte de la empresa".  

No te pierdas la sección con todos los testimonios en el audio que tienes aquí disponible.

Temas relacionados