Una oyente se hace Instagram para seguir a su hijo, pero él la bloquea: "Tuve que amenazarlo con la paga"

Instagram fue una de las primeras redes sociales en demostrarnos que la relación más cercana que tenemos es con el teléfono móvil. La plataforma de fotos ha cambiado nuestra apariencia con filtros, nos ha mostrado qué comida es la más deliciosa, cómo deberían ser las relaciones perfectas y cuáles son los mejores destinos para irnos de vacaciones.

Filtros y viñetas de colores que cumplen 10 años. Fue el 6 de octubre de 2010 cuando Mike Kriger y Kevin Systrom, dos jóvenes programadores de San Francisco, crearon ‘Burbn’, una plataforma para compartir fotografías desde dispositivos móviles sin necesidad de disponer de un ordenador. Poco tiempo después decidieron cambiar el nombre a ‘Instagram’, resultado del juego de palabras “cámara instantánea” y “telegrama”. En la actualidad esta red social, propiedad de Facebook desde 2012, vale alrededor de 100.000 millones de dólares.

Este jueves en 'Herrera en COPE' hemos querido saber cuáles son los perfiles más seguidos por los oyentes. Carlos Herrera, por ejemplo, ha confesado que sigue a Úrsula Corberó, la actriz de 'La Casa de Papel', y que se entera de dónde está su hija, la modelo Rocío Crusset, gracias a las imágenes que sube a la red social.

ESCUCHA AQUÍ A TODOS LOS 'FÓSFOROS'

Entre todas las llamadas ha destacado la de Victoria, que ha dicho que ella se hizo Instagram, principalmente, para seguir a su hijo. "Es un niño que no cuenta las cosas”, ha justificado.

Cuando sus sobrinos le contaron que colgaba historias, decidió hacerse de la red social. Así se enteró de que tenía novia. “Ahora los sigo a los dos”, ha confesado.

No obstante, su hijo primero la bloqueó. Entonces la 'fósfora' lo amenazó con quitarle la paga y él la volvió a admitir entre sus seguidores “a cambio de que no hiciera ningun comentario”. “Por favor te lo pido, mamá”, le insistió él.

A día de hoy, el hijo de Victoria sube fotos con su novia “dándose besitos, cogidos del culo... No está bonito. En la mesa lo comentamos y no está bonito”, ha dicho la oyente con resignación.