“El Ejecutivo se empeñó en sacar el impuesto a las empresas energéticas que le pedían sus socios de izquierdas en contra del criterio de sus socios de derechas”

Toda la actualidad en el monólogo de Sergio Barbosa de este viernes 20 de diciembre de 2024

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¿Qué tal? ¿Qué tal? ¿Qué tal? Buenos días. Saludos de Sergio Barbosa en nombre de la gente que hace posible Herrera en Cope en este viernes 20 de diciembre de 2024. El típico viernes que esto huele ya a desbandada navideña. A gente que viene un poco resacosa de la fiesta de Navidad de COPE, que la fiesta de Cope es para verla porque está la noche de Ibiza, la noche de Mykonos y luego ya ahí está la fiesta de COPE. 

Y esto huele también a gente que hoy mismo coge las maletas para irse unos días de descanso si es que no se los han cogido ya. En todo caso, no dejen de escuchar la radio porque la actualidad viene de un entretenido que a veces parece escrita por los guionistas de aquellos grandes culebrones de los años 80. Los que tengan de 40 para arriba se acordarán de cuando toda la familia se sentaba en el sofá a ver, yo qué sé, Falcon Crest. Que cuando Ángela Channing hacía algo malo te quedabas así como diciendo, ay qué mala, qué lata. 

 Bueno, pues la actualidad político-judicial viene un poco así. A cada cosa que conocemos nos quedamos un poco con esa sensación de, pues va a ser verdad que aquí alguien ha actuado con la malicia de los malos de culebrón. ¿Por qué lo decimos? Pues mire, tiene usted que abrir mentalmente la carpeta que pone Fiscal General imputado por filtrar datos de un particular para perjudicar a una rival política. Ya sabe, lo de haber filtrado a la prensa los datos de la pareja de Ayuso para airear sus problemas con Hacienda para poder llamarle delincuente confeso. Aunque en realidad nadie sea un delincuente confeso hasta que no lo dictamine un tribunal. 

Y aunque ese tipo de filtraciones solo sirvan para dejarnos a todos los ciudadanos en manos de cualquier gobierno sin escrúpulos que quiera utilizar nuestros datos personales para tratar de hacernos daño. 

“La comparecencia de Sánchez ha sido tan inaudita como el hecho de que García Ortiz estuviera utilizando su móvil mientras se registraba su despacho como imputado”

Sergio Barbosa

Herrera en COPE

Bueno, pues resulta que el Tribunal Supremo ha levantado el secreto sobre el informe que recoge que se encontró en los dispositivos del Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz, y en el volcado del teléfono del socialista Juan Lobato. 

En el ordenador de sobremesa de García Ortiz se han encontrado la cadena de correos entre el abogado de la pareja de Ayuso y el fiscal de delitos económicos, Julián Salto el 12 de marzo. Y también el reenvío a la Fiscalía Provincial de Madrid el día 13. 

      
             
      

Pero aquí la sorpresa, lo raro, raro, raro que diría que él, es que cuando han ido a echar mano del teléfono móvil de García Ortiz, resulta que en sus aplicaciones de mensajería, ¿saben cuántos mensajes han encontrado entre el 8 y el 14 de marzo? Cero patatero. Seis días que coinciden con los días previos a la filtración sin ningún mensaje en el móvil. Es decir, una de dos. O el fiscal general del estado estuvo seis días sin mandar ni recibir ningún mensaje, y esos días don Alvarone fue Álvaro el mudito, y además nadie se acordó de él para mandarle ningún mensaje, o lo mismo le dio por borrar todos los mensajes comprometidos que pudiera tener durante aquellos días, incluidos, quién sabe, con Pedro Sánchez, si los hubiera. 

Cosa, eso de haber borrado los mensajes que debe ser lo que pasó porque la Fiscalía ha venido a decir que hay un protocolo por ahí que por seguridad obliga a borrar los mensajes. Lo que pasa es que ese protocolo, por lo que dicen muchos en la Fiscalía, no lo conocen ni en su casa. Es tan poco conocido, de hecho, que la fiscal jefe de Madrid no lo aplicó, y a ella sí que le han pillado en su móvil los mensajes que comprometen a García Ortiz

Pero oye, como si fuera Ángela Chanín, Pedro Sánchez ha hecho un ejercicio de cinismo y de hipocresía nivel épico para decir que si no hay mensajes en el móvil del fiscal, es que no hay pruebas. 

      
             
      

A Sánchez le faltó decirle a Lorenzo Lama, no nos gustaría que cuando la UCO fuera a analizar el móvil del fiscal general los mensajes ya estuvieran borrados, ¿verdad? Y ponerse a acariciar un gato mientras sale de la sala con su cuerpo torero. 

Claro, según Sánchez, si cuando ha llegado la Guardia Civil ya no había mensajes en el móvil de García Ortiz, es que no hay pruebas. Y los que los critican, deben pedir perdón. Y el hecho de que los mensajes hayan sido borrados, ni lo comenta. Y que esos mensajes estén en los móviles de los otros implicados, también lo ignora. 

Y coge con su cuerpo torero y se marcha de la sala de prensa de Bruselas tan ricamente. 

      

eliminar pruebas es una prueba.

Estamos ya en un punto en el que el comportamiento del presidente del gobierno recuerda a ese tipo de personas con cierta tendencia a tergiversar un poco la realidad. Llámenme observador.

 Miren, la comparecencia de Sánchez ha sido tan inaudita como el hecho de que García Ortiz estuviera utilizando su móvil mientras estaba siendo registrado su despacho como imputado. Y que encima tuviera a su lado a su mano derecha, que es la que debería fiscalizar al fiscalizador si este está imputado y se niega a dimitir. 

Como dice hoy ABC, eliminar pruebas es una prueba. Sobre todo porque como los whatsapps son como un doble espejo, por más que tú borres las conversaciones de tu móvil, si has hablado con otras personas, en los otros móviles sí aparece lo que tú hablaste o dejaste de hablar. 

Y lo incautado en los otros móviles  apuntaba, por lo dicho, y por las horas en las que se dijo, a que desde la fiscalía se pudo orquestar una filtración ilegal, que es lo que sospecha también el Supremo. 

Por eso García Ortiz ha acabado imputado, al igual que la fiscal provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, más conocida como Lady Cianuro, porque en esas conversaciones que sí estaban en su móvil llegó a bromear con poner un poquito de cianuro a la famosa nota de prensa con la que coronaron todo esto. 

Pero es que antes de que la fiscalía se atreviera a sacar la nota de prensa, estuvo el jugueteo de si el asunto lo destapaba primero Juan Lobato o los medios sanchistas. Ya saben que Lobato se negó, con buen criterio, alegando que si él salía en la Asamblea de Madrid con el correo confidencial, lo primero que le iban a preguntar es, ¿y tú cómo has conseguido ese correo confidencial de la fiscalía? 

Y ahí es cuando Lovato preguntó, ¿eso cómo es que se tenía? Y en el PSOE, tras un rato sin contestación, le acabaron comunicando, oh sorpresa, que ya estaba en la prensa amiga y que, por tanto, ya podía salir él a decir aquello de, 'hay una cosa que sale en la prensa y que es muy grave, señor Ayuso'. 

Como aquello tenía toda la pinta de ser una chapuza, Lobato acudió a notaría para dejar constancia de esos mensajes intercambiados con miembros de Moncloa. 

Y ahora, el informe de la UCO sobre el volcado de todos esos mensajes de Lobato ha venido a decir que hubo una coordinación entre Moncloa y la fiscalía para filtrar el informe confidencial del novio de Ayuso

Básicamente, antes de que se filtrara a la prensa, demasiados miembros de Moncloa tenían constancia de un informe fiscal que debía ser confidencial. Y no solo la jefa de gabinete de Óscar López, sino también los dos últimos secretarios de Estado de Comunicación. 

Y es que Lobato también preguntó a Francesc Vallés que cómo podía ser que ellos tuvieran ese correo. Y Vallés, entonces secretario de Estado, al cabo de un rato le reenvió el enlace en el que se veía que El Plural lo acababa de publicar. Pero es que antes de eso, la jefa de gabinete de Óscar López ya avisó a Lobato. 

Dice Francesc Vallés que estés en guardia porque esto va a ir a más. Como que ya sabían en Moncloa que se iba a filtrar el documento de la fiscalía. 

Luego, otro socialista, David del Campo, le comentó a Lobato que tanto Vallés como Ion Antolín, el ahora secretario de Estado de Comunicación, en sustitución de Vallés, también le había escrito a él para hacerles ver que tenían que hablar del mail del novio de Ayuso. Vamos que la situación para el gobierno y para los elementos sanchistas de la fiscalía es hoy. Si cabe, más incómoda que ayer, por más que Sánchez haya hecho en Bruselas el papel de malo de película acariciando a un gato, negando la pillada, con gran cinismo. 

abrir la carpeta del caso Ábalos 

A todo esto la cosa no se acaba aquí. Porque ahora es cuando yo le invito a usted a que cierre la carpeta de la filtración de la fiscalía para abrir la carpeta del caso Ábalos. Un caso en el que el propio Ábalos ha tenido un giro de guion también muy propio de Falcon Crest.

 Justo cuando el Supremo ha pedido el suplicatorio al Congreso para procesarle, justo cuando ha visto que sus explicaciones no han convencido al juez, justo cuando se ve con una acusación formal por cuatro delitos muy graves, participación en organización criminal, malversación, cohecho y tráfico de influencias, coge Ábalos y decide demandar a la Guardia Civil por haberle investigado siendo él diputado y teniendo por tanto inmunidad judicial. 

¿Qué denuncia Ábalos? Pues que la Guardia Civil, el pasado mes de diciembre, cuando todavía la investigación era secreta, interceptó un mensaje que el hermano de Koldo iba a entregar a Ábalos. Y Ábalos dice que eso no se vale, porque él estaba aforado y que por tanto la Guardia Civil se extralimitó y que todo lo que hayan podido averiguar de él, gracias a esos seguimientos, debe suprimirse. 

La verdad es que no sabemos qué recorrido tendrá la demanda de Ábalos contra la Guardia Civil, porque la UCO podría esgrimir que en realidad estaba siguiendo a Koldo, que no estaba aforado, y que los tejemanejes de Koldo, mandando a su hermano a entregar algo a alguien, resulta que ese alguien resultó ser el diputado Ábalos. 

El caso es que aquí hay algo que no se nos puede escapar. Si Ábalos tiene ahora la capacidad de escudarse en su condición de aforado para poner en solfa la investigación de la UCO, que lo pone contra las cuerdas, es gracias a Pedro Sánchez, porque fue el presidente del gobierno el que en verano del 21 decidió echarle del gobierno y de la sala de máquinas del PSOE, pero aún así mantenerlo en las listas del PSOE para que siguiera estando aforado. 

A esto sumen además los balbuceos de la exministra Reyes Maroto, que el martes negó conocer al Dama y ayer tuvo que reconocer que sí, que el comisionista tenía su móvil personal, que ya le llamaba por el nombre de pila y que hasta le dio el contacto del director de Tour España. Pero es que hoy encima conocemos y leemos en The Objective que le pidió ayuda Aldama para poder seguir en las listas. Menos mal que no lo conocía y menos mal que Aldama no tenía manos en el PSOE. 

nueva derrota parlamentaria

Y entre tanto, por si no tuviéramos ya bastante con todo esto, resulta que el gobierno ha sufrido una nueva derrota parlamentaria que ahonda la sensación de que esta legislatura no tiene ningún sentido. El Ejecutivo se empeñó en sacar el impuesto a las empresas energéticas que le pedían sus socios de izquierdas en contra del criterio de sus socios de derechas. Y al final, sus socios de derechas, mayormente PNV y Junts, se aliaron con el PP para tumbarlo

Y claro, aquí lo que se confirma, por si alguien todavía no lo tenía claro, es que el gobierno de Sánchez está construido sobre una montaña de bulos. El bulo de que son una mayoría de izquierdas cuando en realidad no sacan nada adelante si no quieren Junts y el PNV. O el bulo de que su mayoría está sustentada en una mayoría social, cuando está sustentada en unos partidos dopados por el desastre de ley electoral que tenemos. O el bulo, de eso que presume tanto Sánchez, de que termina el año controlando el BOE. 

El BOE en realidad Sánchez solo lo controla si sus socios le dejan, y cuando le dejan es para que siga la rapiña. Esa es la realidad en estos tiempos de lucha contra los bulos y de mucho, muchísimo cinismo.