“No hay que tomarse al pie de la letra lo que dice Trump, pero sí que hay que tomárselo en serio, justo lo contrario de lo hecho hasta ahora”

Señoras, señores, me alegro, buenos días. 

Expertos en las cosas tristes. Los hay. Que hoy es el Blue Monday. Es el día más triste del año. Lunes, ya ves, qué tontería, el lunes una alegría entera. Pero han pasado las navidades, ya vemos viendo la cuesta de enero de siempre. La vida es un largo de venir, sin demasiados alicientes y estas cosas. A lo mejor usted hoy está un poco camastrón. Que sepa que es por eso, por el Blue Monday. 

Bueno, y porque realmente los que no sean partidarios de Trump van a tener hoy también una dosis de Trump potentísima,  casi aletargante, porque ayer ya la tuvimos con la presentación, más o menos, de lo que es su proyecto político, este segundo proyecto político, que va a ser bastante más diferente, sobre todo al primer Trump. 

Y hoy es su toma, a las dos de la tarde, la toma de posesión, el 47  presidente de los Estados Unidos. Encuentro con Biden, luego van al Capitolio, en lugar de hacerlo en la plataforma en la que se ve las temperaturas de Washington, lo van a hacer en el interior, en la cúpula.

Y ya esta noche se reúne con miles de sus seguidores en un mitin. Nada va a tener que ver con los hechos hace cuatro años, cuando aquella multitud animada por Trump tomó el Capitolio, que seguramente van a ser, excepto los que utilizaron mucha violencia, indultados. 

¿cómo va a ser esta segunda época de Trump? 

Ustedes hacen una pregunta ahí, ¿cómo va a ser esta segunda época de Trump al frente de Estados Unidos, y sobre todo, ¿en qué me va a afectar a mí, o en qué me va a repercutir a mí? Mire, no es fácil decirlo, los planes iniciales de los presidentes norteamericanos, muchas veces se tuercen por acontecimientos literalmente inesperados. 

Pero este segundo Trump va a ser más profesional en la gestión, equipos más estables, más proteccionismo, una política más exigente con los socios en comercio y defensa, y un protagonismo notable de la economía tecnológica y digital. 

O sea, todos los grandes de la tecnología que hace ocho años abominaron de Trump, hoy están rindiéndole pleitesía. 

Elon Musk fue el primero en marcar el camino, luego han seguido todos los demás. Y lo mismo ha pasado con los aliados de Estados Unidos. Hace ocho años Trump fue recibido con unas muestras de desprecio, de hostilidad, hoy todos son llamadas al respeto, al entendimiento, y el propio Trump ha bromeado con eso. 

Y ahora vendrán órdenes ejecutivas, decretos con medidas restrictivas en inmigración, me imagino, perdones presidenciales, yo qué sé. Aranceles. Vigilancia de las fronteras. 

Pero usted se pregunta, como lo decía antes ya nosotros, eso en quién nos afecta. Pues miren, España lamentablemente cada vez es más irrelevante a la política exterior y las posiciones de este gobierno no van a ayudar. 

De momento Sánchez parece que pretende sacar pecho de su oposición frontal al presidente norteamericano pues bueno, entre un Franco muerto hace 50 años y Trump vivo y en la Casa Blanca es mucho más cool Trump. El problema es que también es un enemigo mucho más poderoso. 

España tiene una economía volcada hacia el exterior, hacia el comercio. Cualquier deterioro en el comercio mundial, hombre, por ejemplo, el que puede desencadenarse con motivo de los aranceles que anuncia Trump, evidentemente influye y nos puede afectar.

Y luego, en materia de seguridad, España es el país que menos aporta a la OTAN, que es una de las obsesiones de Sánchez. Y también es una de las obsesiones del presidente norteamericano. La de Sánchez es no aumentar el presupuesto de defensa. La del norteamericano que se aumente. No llegamos al 1,5% del PIB. Y el consenso general es que se debería llegar al menos al 3. 

Y... Bueno, y entre otras muchas cosas,  usted se pregunta de qué manera le van a pellizcar. Ya lo iremos viendo. Como ya dijimos en su día, a Trump no hay que tomarse al pie de la letra lo que dice, pero sí que hay que tomárselo en serio, que es justo lo contrario de lo que se había hecho hasta ahora. 

golpe de fuerza en telefónica

Y en España, bueno, en España es la crónica del golpe del gobierno en Telefónica para cambiar a su jefe, a su presidente, a su gestor, que es José María Álvarez-Pallete. Es un golpe de fuerza, una muestra de fuerza sin el menor decoro. Tal y como le gusta a Sánchez hacer las cosas. 

Habría que preguntarse ¿para qué se está preparando Sánchez? ¿Qué tiene en la cabeza? ¿Qué le interesa de Telefónica? Una empresa cotizada, sometida a los estándares del gobierno corporativo y de gobernanza. Tiene una junta de accionistas, consejeros independientes, y a un presidente le cambia una junta de accionistas. 

La presidencia de Álvarez-Pallete vencía de aquí a poco tiempo. Y la junta de accionistas, pues podría haber tomado una decisión. No, no, no. Se le ha cesado por la estricta voluntad de un solo accionista, que es el Estado, a través de la SEPI, que controla un 10% de la compañía. 

Se le ha cesado en Moncloa y todos los demás a callar. Hombre, claro, cuando tú eres presidente de una compañía, si el 20% mayoritario quiere cambiarte, te cambia. Esos quienes son el 10% de los saudíes, que hayan ejecutado solo un 5%, y el 10% de la SEPI, que costó 2.300 millones de pesetas al Estado. 

Si luego, además, el otro socio, Criteria, es decir, La Caixa, es decir, Fainé, se pone de perfil, pues tú te vas directamente al carajo. 

Y entonces, ¿a quién ponen? A Marc Mutra. ¿Y quién es el que hasta ahora era presidente de Indra? No hay cómo ser del PSC, independientemente de que . haya hecho una gestión razonable en Indra, el señor Mutra. 

¿Para eso tenemos tantas regulaciones de transparencia, o sea, tanta exigencia con los consejeros independientes, para qué sirve todo eso cuando llega la Moncloa y ordena y manda. 

Oiga, el gobierno se gastó 2.300 millones de euros para conseguir el 10% de Telefónica. En teoría era por razones estratégicas, porque los saudíes un poquito por la espalda, se habían hecho con un 10%. 

Bueno, vamos a salvaguardar la españolidad, interés estratégico de nuestra empresa. A los británicos les pasó algo parecido con Vodafone y lo arreglaron con una ley, no gastándose el dinero y entrando. Cuando tú haces eso es porque quieres más cosas. 

Ahora vamos a ver de qué sirve toda esa fuerza para pactar con saudíes y con la Caixa otras cosas, algo más que el relevo de Pallete por Marc Mutra. 

Esta operación no hubiera sido posible sin el cambio de fondo que se ha producido después de la pandemia en el papel del gobierno de las empresas. 

Desde hace décadas la economía española emprendió un camino de liberalización. Telefónica fue creada por Primo de Rivera. Años 20, la dicta blanda, aquellas cosas. La dicta blanda era la de Berenguer, para entender. Y después Felipe González empieza su particularización de la empresa. Qué realmente la abre la privatización, quien la consuma es José Mariano. 

Pero es que ahora estamos asistiendo a un capítulo de renacionalización. Estamos en una clara vuelta atrás en el impulso liberalizador. El gobierno tiene el 10 de Telefónica. Ha puesto al presidente de Telefónica. Tiene el 28% de Indra. Y ha puesto a dos presidentes en Indra. El 28% de La Caixa. Bueno, La Caixa es una especie de segunda marca para sus operaciones corporativas, como esta que acabamos de ver. 

¿para qué se está preparando Sánchez?

Y vuelvo a la pregunta de antes, ¿para qué se está preparando Sánchez? Hay opiniones para todos los gustos y conociendo como conocemos a Sánchez, nada bueno se puede esperar. Sinergias entre Telefónica, Indra y Hispasat, todo bajo el control de un gobierno que tiene vocación autoritaria.

Sector medios de comunicación, está pendiente la concesión de un nuevo canal de televisión, será  para Prisa, claro. Y Telefónica ya está en el sector de los contenidos a través de Movistar. 

Y luego el dinero que mueve de publicidad. Es el primer anunciante de España. 

Vamos a ver cómo lo mueve, si se sigue moviendo como ahora, con criterios profesionales. 

Y oiga, los peor pensados también hablan de la inquietud del gobierno por controlar ese famoso registro de llamadas del teléfono del fiscal general, que la UCO tiene orden de rastrear. 

Bueno, estas cosas las iremos viendo.