Carlos Herrera: "Benedicto XVI era un tipo ejemplar, un cristiano sin fisuras y un intelectual europeo"

Pues ya es el día dos...El segundo día de este 2023, que es que pasen 364 veces lo que ha habido desde las uvas aquí, volvemos a estar en las uvas con la incógnita de qué es lo que nos depara este año, que hay bastante señales que nos indican por dónde van los caminos. Desde luego, dos citas electorales de las que ahora hablaremos, fundamentales. Siempre decimos que todas son fundamentales en nuestra historia democrática, estas desde luego parecen incluso un poco más.

Pero este es el año en el que hemos empezado despidiendo a Benedicto XVI que falleció a los 95 años y que hace que hoy a las 9 se abra la capilla ardiente la Basílica de San Pedro. El jueves lo contaremos desde Roma, como tantos otros miles de fieles que van a peregrinar a la Ciudad Eterna. Los detalles del funeral que presidirá de forma muy novedosa un Papa, para despedir a otro Papa.

Francisco haciéndolo sobre Benedicto XVI, con las especulaciones que se desatan ahora acerca de si esto libera o allana el camino al Papa Francisco, como ha sugerido ya, establecer una renuncia el día que no se sienta capaz de poder hacer frente a todas sus obligaciones. Hoy se especula mucho en los medios. Más allá de todas esas cuestiones, la figura de Benedicto XVI, a la que dedicaremos algunos minutos esta mañana, es indudablemente la figura de un gigante, un gigante intelectual y espiritual. Un gigante que hizo posible matrimoniar dos elementos que en sí mismo pueden parecer antagónicos, pero que demostró que no son: Una la la fe, y la otra la razón.

Era un tipo ejemplar, un cristiano sin fisuras y desde luego un intelectual europeo de una altura que le hizo estar entre los más importantes de este pasado siglo y lo que llevamos de este siglo.

El mundo durante estos días está mirando a dos lugares esenciales: uno es a Brasil porque Lula, al frente de un gobierno casi de concentración, en el que incluye a muchos tipos de partidos, todos los que no son de Jair Bolsonaro, ha tomado posesión, ahí estado Felipe VI, y también mirando a China, atendiendo a qué nos depara esa pandemia que se ha desatado.

Yo le daba esta mañana el dato de que en los últimos días, en las últimas semanas, se han infectado el 18 % de la población de la China, el 18% de chinos son 250 millones de chinos, es la población europea . Y a la espera de qué puede ocurrir cuando se abran las puertas de China, cosa que va a ocurrir dentro de poco. Ya se están tomando alguna precauciones por parte de al menos algunos países europeos, o al menos exigir que el que venga, venga vacunado o que venga con una prueba negativa. Ya se sabe que por muchas puertas que se le ponga al virus, cuando se le ponen las puertas, el virus ya ha entrado.

¿Y en España qué? En España un año 2023 que vive la apasionante convocatoria de 2 elecciones. Una que aúna las locales y las autonómicas, la mayoría de las autonómicas y otra que son las generales. ¿Es mayo el test para calibrar lo que puede ocurrir en diciembre o en enero, cuando las convoque el que ahora mismo está en la Moncloa y que tiene la prerrogativa de hacerlo? Desde luego, si eso ocurre así, atención a lo que pasa en mayo con algunas candidaturas del Partido Socialista que pueden verse menguadas, y ahí están los barones luchando para que Sánchez ni se acerque en la campaña y la traducción que eso puede tener después.

Nos enfrentamos a una época en la que ya, una vez hechas las concesiones que convendría recordar cuáles han sido, las concesiones de Sánchez a las minorías con las que gobierna y para las que gobierna...Sedición, malversación, intento de control del Tribunal Constitucional, acusar a los jueces de golpe de Estado y aprobar una serie de leyes absolutamente disparatadas concebidas por su socio comunista del gobierno, que se llama Podemos, del que él parece ser miembro... Partido que parece liderar Pedro Sánchez.

Después de todo ello, qué repercusión tiene todo eso en una ciudadanía que sigue demostrando, a pesar de que hay sondeos que dicen que va a la baja, sigue confiando, que sigue dispuesta a votar a Pedro Sánchez. Al sanchismo, esta especie de patología política que ha desarrollado este individuo en el gobierno de las cosas de España. Un gobierno socialcomunista que, desde luego, ha garantizado el camino a la pobreza amortiguar la con paguitas de beneficencia.

Otorgar ayudas sociales no es sinónimo de éxitos, como quiere vender el Gobierno, es sinónimo de fracaso. Pero es el camino en el que nos encontramos a lo largo de estos próximos meses de precampaña electoral de mayo, precampaña en la que el gobierno va a presumir de todo el dinero que vuelca en ayudas sociales. Después de haberse quedado con 33 mil millones de euros extra confiscados con la inflación y con la subida de los impuestos, y gastándose un mínimo de ese 33% de lo atracado en dar limosnas, a cambio de que le voten.

Pero hay mucha gente dispuesta a votarle. Hoy hay dos encuestas, El Mundo y El Debate, las dos señalan, de forma casi coincidente, la ventaja en una serie de escaños... 30 del Partido Popular, que, en combinación con Vox, podría obtener una mayoría.

Y la economía, la economía española, es la única economía que no ha recuperado niveles de la prepandemia. Y cuando el Gobierno presume de crecimiento, lo que debería de presumir es de rebote de la economía, con una inflación, particularmente la subyacente, que es aquella que depende menos de elementos más volátiles, como energía, alimentos frescos, etcétera, que ha alcanzado el 6,9 y está subiendo.

Les contaba ahora lo que escribía Daniel Rodríguez Asensio en Vozpópuli, el dato que nos daba y que es fundamental entre el cuarto trimestre del 2019 y el tercero del 2022, el PIB de España ha aumentado 17.000 millones de euros. Pero es que la deuda española ha aumentado en 280 mil millones de euros, es decir, necesitamos 16 € de deuda pública para generar 1 € de riqueza nacional.

Por ahí no vamos a ninguna parte. Por eso, presten ustedes atención a todo el desarrollo que va a poner el Gobierno en estos meses, el gobierno de Pedro Sánchez y de Podemos y de las minorías para las que gobiernan, Esquerra Republicana y Batasuna y demás fauna...Para ver cómo amortigua esos datos de cara a las elecciones de mayo.

Fíjense ustedes, el número total de votos que se obtenga en mayo puede indicar lo que puede pasar en las generales. Al menos, en 2004 no ocurrió así, pero en otras convocatorias sí. En las anteriores, en la generales, el PSOE obtuvo un millón y medio de votos más, exactamente lo que le sacó en las generales al PP, cuando fue la última convocatoria de Pedro Sánchez. Vamos a ver qué ocurre este año. Nos asomamos a un futuro incierto, pero en el que el sanchismo, como absoluta patología política, puede seguir teniendo el control del poder al cabo de un año lleno de incógnitas.