"Ayer demostró García Ortiz que no quiere defenderse de lo que se le investiga"

Señoras, señores, me alegro, buenos días. 

Ya levantándose, poniéndose en marcha. La seis es la buena hora para ponerse en marcha, y no se ha levantado un poquito antes. Un poco de limpieza, un poco de café, y a trabajarse el día de hoy, el jueves 30 de enero del 2021. En nada estamos ya en febrero.

Los restos de la borrasca Ivo van a dejar vientos norte, sureste, estrecho, canarias, lluvias, en la cordillera cantábrica, nevadas en los pirineos, y luego un poco de agua repartida y huvia débil, en varias partes de la península. Las temperaturas van a bajar especialmente en el norte.

Esta madrugada hemos vivido, hemos contado, y lo estamos contando ahora, vamos conociendo detalles, y ahora nos dará algo más nuestro corresponsal en Washington, David Alandete. Acercado del trágico suceso en el aeropuerto Ronald Reagan de Washington, donde un avión de pasajeros de American Airlines ha chocado en el aire con un helicóptero, no cualquier helicóptero, un Black Hawk, es un helicóptero de dimensiones considerable, de los que usa el ejército, provocando una explosión en el aire, dejando de momento según algunas fuentes, pues 64 muertos. De todos los pasajeros del avión, y me imagino que los del Black Hawk, aún como no lo sé, seguro, no le adelanto a nada.

Sí que, claro, se ha visto el enorme destello en la mitad de la noche de Washington, han caído a las aguas heladas, por cierto, del río Potomac. Esto habrá dificultado más el rescate, y no se entiende hasta ahora, se está tratando de averiguar qué ha pasado, como puede ser que los controladores no pudieran habitar ese choque, que fallara todo el protocolo de seguridad, que lo hay para este tipo de accidentes, y estamos hablando del peor siniestro aéreo en Estados Unidos desde los atentados del 11 de septiembre del 2001.

Y luego hay una noticia más amable, y es que hemos colocado un satélite Spainsat-NG1 desde Cabo Cañaberal, cuénte que salía de Cabo Cañaberal, que hace de autobús, que lleva los satélites que usted le quiera colgar. ¿Y para qué queremos ese satélite? Pues para las transmisiones de defensa. Ha salido bien, está en órbita, otros países tenían un satélite de ese tipo, y tú si no tienes, pues lo alquilas a otro país, pero bueno, es como facilitar que otro país pueda interceptar las comunicaciones de defensa, tampoco le intiren porque interesarle a nadie. Este Spainsat ha tenido alguna participación de alguna empresa española, que ha demostrado que con este proyecto puede estar en la élite del sector espacial, escuchen, escuchen. ¡Vamos a ver! Bueno, hoy hablaremos con alguien que sabe precisamente de esto y nos contra la importancia de que este satélite español da nuevas vueltas por allá arriba.

Bueno, aquí el fiscal general del Estado, como pueden imaginar, protagonista ayer de casi un desafío, al Tribunal Supremo. Hombre, desde luego de un absoluto desprecio al Tribunal Supremo. Estandarte casi casi de la lucha contra el laufare. Desde luego también, Servidumbre de Sánchez, símbolo de la estrategia deslegitimadora de la justicia que saca adelante este gobierno.

Ese es Álvaro García Ortiz. Ese es el que protagonizó ayer la declaración como imputado ante el juez Hurtado. creyendo aquello de que la mejor defensa es un buen ataque. O sea, acusar al juez Hurtado de prevaricador seguramente será lo siguiente. Ayer demostró García Ortiz que no quiere defenderse de lo que se le investiga, no quiere demostrar que no filtró documentación reservada.

Usó prácticamente una defensa política, censurar al tribunal, acojarse al derecho a no responder el más propio de Narcos, no de un fiscal general del Estado. Y desde luego no de aquel que dice que no tiene nada que ocultar. Sí, además de todo eso, lo que tenía que ejercer de fiscal no quería hacerlo, y él solo contestó a las preguntas preparadas ya el cuestionario de preguntas con su abogado del Estado que le pagamos todos, pues aquí los tienen. Don Alvarone con esa vocecita de no haber roto un plato.

Ángel Luis Hurtado dejó en el ambiente, ese aroma tan propio del sanchismo, el aroma de acusación de Lawfare. Sí, es tremendo que un fiscal general haya acabado imputado por la filtración de datos confidenciales de la pareja de un rival político. Si ya es más tremendo todavía que ese fiscal se niegue a dimitirse presente en el supremo como imputado todavía en el ejercicio de su cargo, lo que ya no tiene nombre es que aproveche su declaración para dar a entender que el juez que le acusa está contaminado políticamente y pierde todo el decoro. El hombre que está llamado por mandato de perseguir el delito al verse el mismo en la tesitura de haber delinquido lejos de colaborar lo que hace es defenderse a sí mismo.

Y la que tenía que ejercer de fiscal, María Ángeles Sánchez Conde, teniente fiscal del supremo, que tenía la obligación de preguntar, hombre, pincharon un poco al acusado, pues tampoco quiso preguntar qué hizo la señora Sánchez Conde. Pues callarse con una puerta alegando que está en contra del proceso al considerar que el registro del despacho de García Ortiz no fue legal, que está recurrido y evitó meter en problemas a su jefe.

García Ortiz dijo que el juez Hurtado viene predeterminado para culparle y tampoco le contestó nada. También sacó la navaja y soltó insinuaciones graves, además de que el juez Hurtado está politizado, desacrevitó de manera torticera la fiscal superior de Madrid, Almudena Lastra porque ésta fue la que le puso en la picota con su declaración como testigo.

La declaración de Lastra le hizo mucho daño a Alvarone y se defendió, negó haber mantenido la conversación con Lastra en la que ella le había lanzado la pregunta de Álvaro, lo has filtrado tú y el otro dijo, bueno eso ahora no importa. Dice García Ortiz que eso es mentira, que una fiscal no se dirige así en superior. Pero es que hay más.

Dijo que Lastra está en su contra porque se opone a su gestión al frente de la fiscalía, o sea le ha acusado de mentir en su declaración como testigo. O sea que hemos llegado a un punto de navajeo grandísimo que ya veremos como continúa.

Hoy declara como imputada Lady Cianuro, la fiscal provincial de Madrid Pilar Rodríguez, que es, que le dio la nota de prensa que se iba a publicar con datos del novio de Ayuso y en vez de hacer a su jefe que eso podía ser delito hacerle ver, le tocó las palmas y dijo vamos a incorporar un poco de cianuro, o sea otra fenómeno.

Bueno y finalmente este jueves entré en vigor del decreto que no se podía trocear según Sánchez, pero ahora el argumento Monclovita que ya utilizan en el Loro Park, todas esta sarta de cuantistas de los ministros del gobierno de Sánchez es que no se ha troceado, se ha fraccionado. Ganas de reír, qué colección. Bueno me lo ahorro.