Así califica Herrera el contenido del folio que firmaron Sánchez e Iglesias en su 'pacto del abrazo'
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Señoras, señores. Me alegro, buenos días.
Esta ha sido una madrugada en la que hemos asistido a un discurso rigurosamente histórico. El primero de un Rey español en Cuba. Cuba era una pieza esencial de la Corona española desde el descubrimiento de América. Pues desde que se descubre América hasta ahora, ningún jefe de Estado español había ido a Cuba. Y ustedes me dirán: "No, yo he visto al Rey Juan Carlos paseando por La Habana con Aznar". Aznar con la chaqueta al hombro aquel día que el Rey le dijo: "Yo no me la puedo quitar, que llevo tirantes". Ahora, mañana te van a dar lo más grande. U efectivamente le dieron.
Aquel día que vaciaron La Habana para que no hubiera nadie en contacto con la delegación española. Estuvo Juan Carlos I pero como miembro de la cumbre Iberoamericana, que se realizaba en aquel país. No como jefe de Estado español que visita el Estado cubano. La última perla del Imperio Español que se pierde en el 98 y que da paso al deprimismo español en un siglo tan convulso, que comenzó con una Guerra de Independencia y acabó con el Imperio desperdigado.
Felipe VI ha defendido los derechos humanos y la democracia ante la dictadura castrista. Está demostrando convicción en una visita que siempre es incómoda. Cuba es un lugar donde los españoles son queridos y se preocuparán mucho de que no te pase nada. Pero Cuba es una dictadura atroz que ha instalado en su territorio durante más de de sesenta años con el beneplácito de los amigos de las dictaduras, un régimen que se ha perfeccionado en las dos cosas que el comunismo sabe hacer mejor que nadie: implantar el terror y la miseria.
Ante ese escenario, el Rey ha subrayado que es el propio cubano el que debe decidir sobre su futuro porque los cambios de un país no pueden ser impuestos. Eso de los derechos humanos, la democracia, la dignidad de las personas está muy bien decirlo. Porque su padre hizo lo mismo, en todas las visitas a las que fue. Visitas que no eran especialmente fáciles y era mirado con lupa. Él defendió esas mismas cosas ante la dictadura argentina, la china y ante cualquier otra. Porque los Reyes no visitan regímenes políticos. Visitan países, a la población y a los españoles que están allí. Pero esas palabras de Felipe por un lado le han entrado a estos y por otro lado les sale. Pero bien está lo que bien continúa y bien acaba.
Esa es una frase que podríamos adaptar también al mercado persa de la investidura que empieza ahora. ERC y JxCat poniendo cara de pocos amigos y negando con la cabeza cada vez que Adriana Lastra les ofrece los mejores cabellos del desierto. Otegui bailando con la danza de los siete velos. El PNV contando billetes apartado. Los de Teruel existe con cara de "¿esto qué es? A ver cómo me espabilo y saco lo mismo que estos". Los del BNG, que acaban de decir que eso de que van a votar a Sánchez nada, primero hay que hablar.
Lo primero que pide ERC es que se reconozca un conflicto del Estado con Cataluña. ¡Con Cataluña! No con unos cuantos catalanes que están clavando clavos a las ruedas de los autobuses y haciendo la vida imposible a la gente. ¡Con Cataluña! ¡Cómo si Cataluña entera fueran ellos! Quieren una mesa, un mediador internacional y a discutir sobre lo divino y lo humano.
Todos quieren un derecho que no existe: el derecho de autodeterminación, un derecho que no existe. Y que la bobería política de nuestro tiempo hace que España sea una excepción. Un país donde haya una importante formación de partidos que piden algo que no se pide en ninguna parte. Nadie reconoce el derecho de autodeterminación, que es una cosa que la ONU puso en marcha para las colonias del siglo pasado en África. Y es que a Cataluña lo que le queda es compararse con el Congo belga. Pero no se alarmen, al final se vendrán a un acuerdo. ¿Cuándo van a tener a su alcance un gobierno que les necesite tanto y estén dispuesto a casi todo? Este Gobierno se forma después de que un presidente débil y fracasado - fracasado porque ha perdido escaños y votos en unas elecciones que había convocado para su mayor gloria - se abraza a otro que se ha dado un revolcón. Es que Podemos tenía 71 escaños y ahora tiene 35. Entre los dos han perdido 1.500.000 de votos.
De ahí la prisa que se han dado. Es decir, que no dé tiempo a debate alguno dentro de nuestros partidos. Que no dé tiempo a que Felipe González o el de la moto dentro del PSOE a decir que tengo que pactar con Casado. "¡Que no quiero, coño! ¿Cómo tengo que decirlo?" A mí lo que me gusta es la ultraizquierda. De ahí que no hubiera debate. El folio que presentaron está a la altura de la capacidad discursiva e intelectual de Iván Redondo, de Adriana Lastra y de estos" ladenauers" que ahora pueblan en el partido socialista y los que hay en Podemos. ¿Ustedes se han leído ese folio? El derecho de los animales, la conversación con Cataluña... ¿Cómo que con Cataluña? ¡Será con los catalanes! Y con los diferentes tipos de catalanes. Es un folio propio de parvulario o de asamblea universitaria mala.
Ha habido que tapar un fracaso rápido y sobre todo que nadie empiece a hablar de un gobierno estable con el PP. Igual (Sánchez) tiene el plan 'B' guardado en el cajón. Éste no tiene ningún tipo de escrúpulos. Es lo que es. Pero permanezcan ustedes atentos a la pantalla porque a cada día que pasa un nuevo afán se renueva. Y felizmente nosotros se lo contamos.