El primer sonido del día de Carlos Herrera: todas las claves tras las elecciones europeas
El comunicador analiza, pormenorizadamente, los resultados del 9-J
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Señoras, señores, me alegro, buenos días.
Damas y caballeros, si ayer no hubiera habido elecciones...estaríamos hablando de la victoria de Alcaraz en el Roland Garros. Ha conseguido ganar en Wimbledon y en tierra batida en Ronald Garros. Esto anuncia una carrera tan meteórica como se preveía, viéndole jugar el tiempo que lo lleva haciendo. Tiempo habrá de analizar la victoria.
Lo que hay que analizar el resultado de las elecciones de ayer. A primera vista, viéndolo muy por encima, diríamos que no ha terminado de contentar a nadie. El PP ha crecido, pero el PSOE que ha aguantado. Es decir, Sánchez pierde pero no se derrumba. Y no se derrumba porque ha vaciado la saca de sus socios aunque haya renunciado al centro y se haya convertido en una parte más de la extrema izquierda o de la izquierda extrema.
¿Podemos decir que el sanchismo ha sobrevivido? Seguramente sí, pero a costa de radicalizarse en el terreno de otros. Miren, en el 23 de junio las 2 fuerzas del Gobierno, PSOE+Sumar, tenían un 44% del voto. Y ahora tienen un 35%. Esto son hechos. Y si quieren, es muy importante esta mañana analizar los hechos y las tendencias.
Los hechos son que el PP le ha ganado al PSOE con 4 puntos de diferencia que solamente se traducen en 2 escaños. Pero la tendencia es que el 23 de julio, el PP le sacó 340.000 votos al PSOE y en menos de un año le ha sacado 700.000. El PP triplica su ventaja en un año. Vox dobla escaños, pero baja respecto al 23-J. Podemos, bueno, sobrevive y eso hace que baje Sumar. Pero ha surgido una fuerza extravagante, la del tal Alvise, que ha superado a Podemos y que empata con Sumar.
Eso le viene muy bien a Sánchez. Y, después de estas elecciones y de que comentemos todo esto, estaremos a otra cosa. El Parlamento catalán va a condicionar más la legislatura que estas elecciones. Si esto era un plebiscito, Sánchez no lo ha ganado. Incluso de haber sido generales, con estos resultados, Núñez Feijóo podría ser presidente. Además, ha frenado el crecimiento a su derecha, aunque no escarba votos en esa dirección.
Pero el PSOE resiste. A pesar de todo lo que ustedes saben. A sus votantes no les importa todo lo que acaba de referir. Y el PP no vacía el saco de aquellos que antes le votaban a él. Eso sí, el PSOE gana las campañas, el PP pierde las expectativas. Pero las elecciones las gana el PP. Sin embargo, el PSOE no paga la corrupción. Por ahora.
Los regímenes clientelares no duran siempre. Nada dura siempre. Pero hay detalles de la jornada de ayer que llaman la atención. Sánchez no se asomó al balcón. Ni Tezanos. Debería tener una denuncia por malversación en el juzgado. Decía, con dinero de todos, que el PSOE iba a ganar con cinco puntos.
Y ustedes se preguntarán. ¿Y ahora qué? Veremos lo que pasa en Cataluña y sus consecuencias pero es evidente que a nadie se le escapa que Pedro Sánchez se va a atrincherar en Moncloa a cualquier precio.
Así que se preparen las libertades ante este Pedro. Y el poder judicial, el Parlamento, los medios, porque Sánchez no está acabado. Si ustedes me piden algún tipo de titular. Les diría que el PP ha ganado desde el centro y no en los extremos. Ya veremos cuáles son los malabarismos del retrato del equipo de opinión sincronizada. Va a ser muy interesante.
Hay un artículo de ABC que me parece muy interesante en el que reflexiona sobre la amnistía, el pacto con quien juró que no iba a pactar, ocupó instituciones, usó la Fiscalía como una secretaría personal, ha descalabrado la política internacional por una campaña de las europeas, ha exhibido en mitines a su mujer. Y aún así, hay gente que le vota. Menos, pero la hay. Todo eso conviene no olvidarlo. Seguramente el PP ha de afinar en programas, mensaje y programas para crecer por el centro y recuperar a aquellos que les votaban.
No ha sido la de Sánchez la derrota de Macron... pero no se dejen nublar. Hay que analizar el resultado en dos claves. Los hechos son que el PP ha ganado al PSOE con 4 puntos y la tendencia es que pasó de 340.000 a más de 700.000. Esto, en fin, conviene no olvidarlo y no perder la cabeza.