Un vecino de un pueblo de Granada abre una panadería y los clientes alucinan con el origen del dueño

La Linterna ha conseguido localizar a un panadero de la localidad de Otura que se ha convertido en toda una celebridad: hasta el alcalde le compra

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Los clientes de una panadería de Otura, un pequeño pueblo de Granada de 7.000 habitantes, han convertido al dueño del establecimiento en toda una celebridad tras descubrir cuáles son sus orígenes y de dónde procede. Y es que se trata del primer local de pan artesano del municipio, con un producto que parece encantar a los vecinos, incluido el propio alcalde, como relató el propio protagonista en La Linterna.

La crisis energética, la inflación, la guerra en Ucrania nos están dando señales de que muy probablemente tengamos curvas en nuestra economía. A pesar de eso, son muchos los que se deciden a abrir un nuevo negocio. El protagonista de nuestra historia, es el ejemplo del que no arriesga no gana.

“Mi vida antes era regular, la quería mejorar y tener un futuro”, explicaba en los micrófonos de COPE. Y es que, como explicó el director del programa Ángel Expósito, “venir de otro país, jugártela prácticamente a una carta con un negocio nuevo y encima en un pueblo donde, por regla general, las oportunidades laborales normalmente escasean más en comparación con las grandes ciudades” tiene mucho mérito.

Fotografía de Otura, pueblo de Granada

Fotografía de Otura, pueblo de Granada

Los orígenes de un panadero de Otura (Granada)

Llegó hace 18 años a España e Ibrahima ha pasado de trabajar en otros ámbitos a hacer pan a diario. “En Otura trabajaba en una empresa de fontanería y climatización durante 5 años”, comentó. Pero, ¿cómo pasas de trabajar ser fontanero a convertirte en panadero? “Hay que ser muy valiente para enfrentarse y hacer un negocio nuevo, algo completamente distinto a lo que estabas acostumbrado”, apuntó Expósito. La decisión de abrir la panadería no fue una tarea fácil. Ibrahima tomó esta decisión de forma muy meditada. ¿El precedente? La pandemia.

Antes de abrir estuve trabajando en una fábrica como encargado general, pero después del Covid, de ir a mi país y volver, lo tenía en mi cabeza”. A pesar de que Ibrahima tuviera sus ideas claras, no tenía todas consigo. Abrir un negocio nunca es fácil y más en un pueblo. Imagínate la inversión que tuvo que hacer nuestro protagonista para inaugurar la panadería. “Al principio mi familia estaba asustada porque no tenía mucho dinero, estaba muy difícil”.

Y es que hace casi 20 años que Ibrahima llegó desde Senegal, de donde salió para encontrar una vida mejor. Ahora, y tras mucho trabajo al llegar a España, Ibrahima finalmente se ha lanzado y hace unos meses abrió su panadería llamada Touba, que en senegalés significa 'felicidad'.

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“Hasta el alcalde me compra”

Todos los panes están hechos con masa madre. Y tiene de todo tipo: panes de almendras, nueces, maíz, perejil... De hecho, nuestro protagonista, hace todos los panes él solo. No tiene más trabajadores. Y eso, tiene mucho mérito. “Puedo hacer mucha cantidad de pan, tengo un horno de leña grande con una mesa automática. Sólo en ese horno puedo meter 278 hogazas”, explicó en La Linterna. Es el claro ejemplo de que todo esfuerzo tiene su recompensa. Los vecinos están más que contentos con el producto y la calidad de este panadero.

Ha conseguido tal nivel de popularidad en su pueblo, que incluso le ha llegado un cliente muy especial. “Estaba aquí el alcalde, que viene mucho a comprar el pan y no sabía que era el alcalde, la gente que lo veía entra y salir me dijo que era el alcalde. Me dijo que le gustaba mucho el pan”, aseguró a Ángel Expósito.

brahima elabora panes artesanos en Otura

brahima elabora panes artesanos en Otura / Ahora Granada

Pero ¿cuál ha sido la receta de este senegalés para triunfar como panadero? Está claro que esfuerzo y la constancia han sido dos de sus ingredientes clave. Y no sólo eso, también la calidad del producto hace que se venda casi por sí sólo. Por ello, nuestro protagonista ha cogido mucha fama en este pueblo de Granada. “También la solidaridad de la gente que son gente muy buena, les gusta el pan y lo que hago. Al principio no hice nada de publicidad, iba por el boca a boca”, comentó.

Está haciendo algo increíble: emprender, en un país que no es el suyo, con todo lo que ello conlleva, con su familia sin apostar por él pero, cuando crees en ti, no hay fronteras. “Con la fuerza y lo que me creo yo mismo, porque si crees en algo tienes que ir a por ello. También he tenido una educación muy buena, y eso también ayuda”, apuntó, antes de concluir: “El pan se vende solo, si lo haces bien y con corazón, si lo haces bien sale bien. Es el pan de la felicidad porque lo llevas a casa y lo pones en el centro de la mesa para todos”.