"Koldo me empieza a provocar ternura, por pringao, porque tendrá mucha pasta, pero se va a comer un marrón como un castillo"
Expósito analiza las últimas declaraciones del caso Ábalos en el Tribunal Supremo tras el revuelo por las palabras de Víctor de Aldama
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Sinceramente el tal Koldo, tan grandullón, me empieza a provocar ternura. Sí, por pringao, porque seguramente tendrá mucha pasta, pero se va a comer un marrón como un castillo. Como buen socialista ejemplar, así le calificó Pedro Sánchez en el libro aquel que le escribieron, guarda lealtad a José, su jefe, José Luis Ábalos. Y al partido, por supuesto.
Y es que nunca antes alguien llegó de guarda de la puerta de un puticlub a consejero de Renfe y a todo poderoso ejecutivo del Ministerio de Transportes. En fin, enseguida te cuento su cita hoy en el Supremo, pero ¿qué quieres que te diga? Me salgo del carril, tal y como está el mundo, lo de Koldo, en fin, qué tierno, pero para luego.
Paseíto, pues, por el mundo mundial.
Ucrania afirma haber matado al jefe de las tropas de defensa radiológica, química y biológica de Rusia. Ojo, con un patinete bomba. El jefe de la defensa química y biológica de las Fuerzas Armadas Rusas, el Teniente General Igor Kiríllov, murió esta mañana cuando detonó una bomba colocada en un patinete eléctrico que estaba aparcado justo en la puerta de su casa, en la capital rusa, en Moscú.
Dame un minuto para explicar quién era este súbdito de Putin, era uno de los generales más conocidos del ejército ruso. Se hizo famoso por crear bajo su mandato un lanzallamas, una de las armas más mortíferas manual que se conoce, el TOS-2. Podría arrasar 4 hectáreas y podía lanzar la llama a 6 kilómetros de distancia, imagínate.
Su obsesión, las armas químicas y bacteriológicas, muchas veces acusó a Zelensky de usar armas prohibidas; nunca se demostró. En su disparate y populismo se refirió a laboratorios extranjeros, sobre todo laboratorios de Estados Unidos, como los culpables y los fabricantes del COVID y de propagarlo por todo el mundo. Pues bien, Ucrania ha reivindicado el asesinato de este tipo, el brazo derecho de Putin en el centro de Moscú.
Mientras, en Oriente Medio va ganando Israel, tras destrozar a Hamás a la cúpula de Hizbula, acuérdate de aquello de los teléfonos móviles. Tapar la bocaza a los ayatolás en Irán y la última derrocar, porque seguro que el Mossad está por ahí, derrocar a Bashir al-Assad en Siria.
Por último, el drama de la inmigración desde África que no ha hecho más que empezar, pero con un detalle hoy. Sobre África, la bomba demográfica va a explotar en pocos años, o pensamos en el continente negro o nos estallará de lleno esa bomba, aunque puede que ya sea tarde. Pero es que hoy, atentos, ha llegado un cayuco a la Isla del Hierro, con setenta y tantos migrantes desde Nouakchott, Mauritania, pero es que casi 60 eran pakistaníes. Coge un mapa, recorre desde Pakistán hasta Canarias. Es impresionante. Y lo siguiente tiene que ver con todo lo anterior.