El creador de 'El caso Asunta' confiesa el aviso que le dio un psiquiatra antes de entrevistar a Rosario Porto
Expósito analiza el fenómeno del 'True Crime' en España y si debería realizarse una entrevista a Ana Julia Quezada
Madrid - Publicado el - Actualizado
4 min lectura
El crimen de la Guardia Urbana o el caso Asunta. En los últimos meses el género del 'true crimen', del basado en hechos reales, parecía estar viviendo una edad de oro. De hecho, se especulaba con la posibilidad de que varios crímenes de gran impacto fueran llevados a la pequeña pantalla. Casos que en su día habían impactado enormemente en la sociedad. Y, en ese punto, la madre del pequeño Gabriel, asesinado en Almería en 2018, dejaba esta reflexión:
“A nosotros esta exposición, si sale, nos va a hacer un daño público. Volverá a estar en las tertulias, en los cafés de muchas personas que, sin querer, entienden nuestro caso como espectáculo y piensan que somos actores. Pero esta es nuestra vida”.
Patricia Ramírez denunciaba que se estaba preparando un documental sobre la muerte de su hijo en el que Ana Julia Quezada, la asesina, había concedido una entrevista en prisión en la que contaba su versión de los hechos.. Patricia decía no estar en contra de los True Crime, simplemente pedía que no se comerciara con la muerte de su hijo. Pero, ¿hay que darle voz a los asesinos? ¿Estos documentales o series que se basan en hechos reales deben contarse desde el punto del vista del asesino o de la víctima?
¿Se debería entrevistar a Ana Julia Quezada?
Pau Ruiz es productor de Ikiru Films y uno de los responsables de la serie 'Tor', que cuenta los crímenes que se produjeron en un pequeño pueblo de los Pirineos relacionados con la propiedad de una montaña a principio de los años 80, y explica en La Linterna que, respecto a las víctimas, “entra la ética de cada uno y lo que quiera decir”. “La época dorada que estamos viviendo del 'True Crime' se convierte en dorada cuando nos alejamos del sensacionalismo a cambio de nada y cuando priorizamos la historia y el respecto a la víctima y a lo que sucedió”, explica.
De hecho, asegura que, desde que desembarcó Netflix en España se prioriza el 'clearance legal', un análisis de riesgo que llevan despachos y abogados que identifican dónde somos vulnerables en cada caso y qué se debe priorizar. Sobre Ana Julia Quezada, subraya Ruiza que es “una línea que quizás deba cruzarse para que pongan líneas al resto”. “No se me ocurriría poner en el centro de la señora a un personaje como esta señora, no es ético, pero si llega a hacerse, la población reaccionaría de tal manera que se crearía un vehículo legal que nos marcase qué podemos o no podemos hacer”.
El aviso de un psiquiatra sobre Rosario Porto
En otro caso diferente, la interpretación que hizo Candela Peña de Rosario Porto en la serie 'El caso Asunta' y que reabrió el interés por el caso del asesinato de Asunta Basterra en el año 2013. Los padres de la niña fueron condenados a 18 años de cárcel por un delito de asesinato con la concurrencia del agravante del parentesco. En noviembre de 2020, Rosario, se suicidaba y el estreno de la serie llevó a que Alfonso Basterra escribiera una carta al creador de la serie.
Ramón Campos, guionista y productor de esta miniserie, explica en COPE que se quedó “impactado” cuando su hermana, psicopedagoga, “se le acercó un niño en el recreo para preguntarle si sus padres podían matarles”. “Eso fue el chispazo de que no era un crimen más, y los medios de comunicación estamos afectando a una generación de chavales, a los que le estamos dando la imagen contraria de la que debería: el sitio más seguro es junto a sus padres”.
Ramón comenzó a investigar el caso y habló directamente con los protagonistas. Con Alfonso se mensajeaban cartas, pero con Rosario fue más allá: “Con Rosario conseguí hacer una entrevista telefónica en la que le puse encima de la mesa algunas de las dudas que tenía y que no consiguió responderme”. Además, explica que recibió hasta una advertencia de un psiquiatra:
“Cuando me preparé para hacer la entrevista a Rosario fui a ver a un psiquiatra y le pregunté cómo debía llevar la entrevista y qué hacer si ella se pone a llorar, y me dijo que la gente a veces lloraba por culpa, no por pena, y la culpa a veces es tan dura como la pena”.