¿Se estudia realmente la Constitución de 1978 en los colegios? Profesores desvelan por qué los jóvenes 'pasan'

Este martes se cumplen 45 años del referéndum que realizamos los españoles para aprobar la Constitución de 1978. Sin embargo, estamos muy lejos del nivel de consenso al que se llegó aquellos años. Por mucho que la Constitución esté en boca de todos los políticos últimamente, explicaba el director de La Linterna, Ángel Expósito, que le daba “la sensación de que mucha gente -especialmente los más jóvenes- han perdido la perspectiva y se han olvidado de la historia”.

Por eso, el programa de COPE analiza en el aniversario de la Carta Magna la educación constitucional de los jóvenes españoles y si conocen su importancia 45 años después. Una Constitución Española que tuvo siete 'padres', con diferencias ideológicas, y que consiguieron ponerse de acuerdo para pactar un texto que sacaría a nuestro país de la etapa franquista.

Siete precursores: Manuel Fraga, Miquel Roca, Jordi Solé, Gregorio Peces Barba, José Pedro Pérez-Llorca, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón y Gabriel Cisneros.

¿Los jóvenes 'pasan' de la Constitución?

La última encuesta realizada por Sigma Dos muestra que un 40% de los chavales de entre 19 y 29 años no se siente representado por la Constitución y sólo el 58% de ellos opina que debe impartirse en los colegios de forma obligatoria. A diferencia de lo que ocurre en países como Francia o Portugal, España no tiene un currículo nacional de Historia común en todo el país. Eso significa que en cada autonomía se estudian periodos históricos distintos.

En regiones como Madrid, Andalucía o Murcia, los alumnos que se preparan para Selectividad tienen que aprenderse desde la prehistoria hasta nuestros días, mientras que en Cataluña, Baleares o la Comunidad Valenciana sólo entran los siglos XIX y XX. Unos abarcan más y otros profundizan más en la Historia Moderna.

Leopoldo Abad, profesor de derecho constitucional en la Universidad San Pablo CEU, explica en La Linterna que “tiene que ver con que los planes de estudios o el sistema educativo no funciona como debiera”. Para el docente, “al final la Constitución se cuenta como un hecho histórico más que la trascendencia de una constitución en un régimen democrático”.

Por su parte, Javier acaba de terminar segundo de bachillerato, y confiesa en COPE que a todos les interesa más cómo se inician los conflictos bélicos, ayudado también por las películas: “Pero lo que es tema Constitución, la única que se le presta atención es a la de 1812, pero a la actual más bien poco”.

Cuenta Javier que en la ESO prácticamente no se da la Constitución y que lo que aprenden los alumnos se concentra en 2º de Bachillerato. “A nosotros lo que nos han dado es un cuadro con todas las constituciones que hay y las características en las que se diferencian”.

En líneas generales, los currículos de enseñanza están sobrecargados y muchas veces, no se profundiza demasiado en los temas. A pesar de ello, muchos profesores han percibido un ligero aumento del interés constitucional gracias al momento político que estamos viviendo. Sin embargo, todavía estamos muy lejos de unos niveles de conocimientos adecuados.

Un profesor de Historia en la Rozas de Madrid, ratifica en COPE que interesan más, por ejemplo, los conflictos bélicos que la Constitución: “Muchas veces se ve más como un documento del pasado, farragosa, y no se da la importancia que tiene”.

¿Por qué no interesa la Constitución en los colegios?

Así, La Linterna se preguntaba este miércoles dónde está el problema: ¿Es culpa del temario? ¿Es culpa de los jóvenes? ¿Del sistema educativo? Antonio Martínez-Novillo, profesor de Geografía, historia y Arte en ESO y Bachillerato, asegura que, como todo problema, hay que mirar a la base, y que “empatizar con la importancia de la Constitución es cronológico, siempre lo han vivido”. Pero también, mantiene, “conceptualmente”, porque “son conceptos teóricos que les resulta difícil llevar a la práctica del día a día, y ahí es donde hay que guiar a los alumnos”.

Antonio imparte clases en el Centro Educativo ADN de Murcia y asegura que “la EBAU es la primera prueba de fuego que tiene un alumno y el hecho de que en cada CCAA sea diferente, no voy a decir que favorezca o perjudique, pero el currículum de la ESO es homogéneo, y se que se ve de manera transversal, cada profesor tiene el deber de transmitir los valores constitucionales a los alumnos”.

Incluso el profesor recuerda en COPE que, en su época, Historia de España no era obligatoria: “ahora sí que lo es, y ellos sí que tienen el interés, y si tú te centras en el siglo XIX y el siglo XX, todo gira en torno a las ocho constituciones”.

“Se debe aprender antes? Sí que debe estar de forma transversal en todas las asignatura”, concluye