LA NOCHE DE ADOLFO ARJONA
Henry Lee Lucas: "llevo matando personas desde hace 10 años y nadie me cree"
Era un hombre sádico que practicaba necrofília y canibalismo al que se le atribuyeron más de 600 asesinatos, en su mayoría mujeres
Málaga - Publicado el
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El expediente que abrimos esta noche es… especialmente controvertido. De Henry Lee Lucas se decía que era un hombre sádico… un hombre que practicaba la necrofilia y el canibalismo… y que podía haber asesinado a más de 600 personas, la mayoría mujeres. Pero también hay quien piensa que el número de víctimas es muy inferior, y que la policía lo utilizó como cabeza de turco para cerrar casos no esclarecidos hasta el momento.
LOS ANTECEDENTES
En La Noche de Adolfo Arjona ha estado Pascasio Hinojosa, criminólogo y miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Criminología de Madrid.
Una semana más, en un expediente de la crónica negra más… tenemos que hablar de hombres con infancias duras. Nada justificaría lo que hizo Henry Lee Lucas, pero conocer su entorno familiar nos ayudará a hacer un perfil exacto de este hombre.
Fue víctima de su propia madre… palizas, abusos sexuales y psicológicos… Era tal el odio que llegó a acumular hacia su madre que un día terminó con su vida durante una discusión y por ese crimen entró por primera vez en la cárcel. 'Al principio tenía constantes peleas en las prisiones por las que pasaba y se comenzó a rumorear que escuchaba voces que le decían que tenía que matar' asegura Pascasio Hinojosa; 'eso llevó a que tres años después de iniciar su condena en prisión, ingresase en un centro psiquiátrico y allí fue diagnosticado de desviaciones sexuales, sadismo, esquizofrenia y por tendencia al suicidio'.
En 1970 fue puesto en libertad anticipadamente, por motivo de hacinamiento carcelario, pero él sabía que volvería a matar.
LOS ASESINATOS
El expediente de Henry Lee Lucas es uno de los más truculentos de los que hemos abierto esta temporada. En 1983 vuelve a ingresar en prisión. Esta vez por posesión de armas. Y es estando en la cárcel cuando, aburrido al no tener cigarrillos ni café, confiesa por escrito: “Yo, Henry Lee Lucas, quiero decir, para que quede claro, que asesiné a la anciana Kate Rich. Pero antes había matado a la pequeña Becky. He tratado de obtener ayuda, pero nadie me ha ayudado. Llevo matando personas desde hace diez años y nadie me cree”.
Normalmente mataba a sus víctimas y luego mantenía relaciones sexuales con ellas. ‘Eso lo tenía acumulado desde su infancia cuando mantenía relaciones con animales’, cuenta el criminólogo; ‘además a algunas de sus víctimas las desmembraba y esto podía formar parte de su modus operandi para intentar ocultar la identidad de sus víctimas ante la investigación de estos crímenes’.
PAREJA CRIMINAL
En toda esta historia hay una pieza clave… un hombre llamado Ottis Toole, el tío de la pequeña Becky a la que confesó haber matado, que habitualmente acompañaba a Henry Lee Lucas en sus asesinatos.
En agosto de 1981, Ottis Toole cometió en solitario uno de sus crímenes más espantosos en el Estado de Florida. Aprovechando el despiste de los padres, Ottis secuestró a un niño, Adam Walsh, hijo de un famoso presentador de Estados Unidos, John Walsh. Con el niño, Ottis hizo todo tipo de aberraciones y después lo descuartizó, aun estando vivo, y lanzó los trozos de su cuerpo en un pantano. Quizá por eso nunca se encontró… salvo la cabeza, que apareció tiempo después con marcas de mordiscos.
Ottis Toole llegó a apuntar que tanto él como Henry Lee Lucas actuaban para una secta satánica, en la que se llevaban a cabo sacrificios humanos para gente de alto nivel económico.
El propio Ottis dijo lo siguiente: “Hubo una época en que ganábamos dinero vendiendo niños a México… niños que empleaban para películas porno… Otros los vendían directamente a gente rica… Teníamos una especie de altar y les rajábamos la garganta. Bebíamos la sangre y a veces cocíamos los cadáveres. En ocasiones los nuevos miembros de la secta mutilaban los cuerpos antes de tener sexo con ellos. Luego había una gran fiesta durante la cual nos comíamos a alguien”.
Por esos asesinatos, cada uno recibió una condena distinta. ‘Las declaraciones de Henry iban acumulando penas, pero nunca se acercaban a la pena de muerte, lo que más llamaba la atención era que dado su coeficiente intelectual tan bajo, podían dar detalles de estos crímenes relacionados con rituales satánicos’ asegura Pascasio Hinojosa; ‘por un lado Henry llegó a ser condenado a pena de muerte por el crimen de una chica de las medias naranjas, que fue como se denominó, pero murió de un ataque al corazón y la pena nunca se llevó a cabo y por otro lado, Ottis fue condenado a pana de muerte por el crimen de un niño al que secuestró y mato, pero en ninguno de estos dos casos se pudo demostrar la autoría’.
Henry Lee Lucas asesinó a más de cien personas, aunque las autoridades, y algunos investigadores, le atribuyeron más de 600 asesinatos. Las víctimas eran casi siempre mujeres, a las que odiaba por el mal recuerdo que guardaba de su propia madre, que lo ridiculizaba, le pegaba y lo sacaba a la calle vestido de niña para mofa del vecindario.
Henry fue condenado a muerte, aunque su pena fue conmutada por cadena perpetua por su colaboración a la hora de localizar los cuerpos de sus víctimas.
El 15 de septiembre de 1996 murió de un infarto en su celda.