La palabra que ha nacido en un pueblo de Badajoz y que amenaza con instalarse en toda España: "Buenísima"
El pueblo es Castilblanco y sus habitantes han elaborado un diccionario con sus expresiones típicas, como contaban en 'La Tarde'
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Castilblanco, un pequeño pueblo de Badajoz de menos de 900 habitantes. Puede que lo conozcas o no, o que conozcas a alguien que es de ahí, o que nunca lo hubieras escuchado en tu vida. Sin embargo, es un pueblo que, más allá de sus paisajes, gastronomía y gente, tiene mucho que decir al resto de España.
Y es que han creado un diccionario callejero con palabras, expresiones y motes propios de su pueblo y sus gentes: “Tupitanga”; “Correguela” o “Camueso” son algunas de ellas, y queremos conocerlas en La Tarde. Palabras que han nacido directamente en el pueblo y de las que han hecho placas para poner en todas las fachadas del pueblo y convertirlas en un diccionario del lugar.
De momento, han encargado 70 placas y, 35 de ellas ya están instaladas. La idea la tuvieron Juan y María Antonia, oriundos de Castilblanco, que dejaron el pueblo siendo adolescentes, y todavía recuerdan esas palabras tan propias.
María Antonia contaba en La Tarde que, por lo pronto, van más de 1.200 palabras que se han acumulado para este particular diccionario. "Mi marido y yo, que tenemos mucha añoranza de nuestro pueblo, sacamos alguna de las palabras, y de pronto se nos ocurrió que las íbamos a recopilar, a los amigos les pareció gracioso y así empezamos. Hay gente que todavía habla de esta manera, viene de esa nostalgia de recordar cómo hablábamos" decía.
Gracias a una cena con amigos
No solo recopilan palabras para este diccionario, sino también motes para todos los habitantes del pueblo. "Mi padre era el zapatero, y yo creo que era los "zapateros"" decía María Antonia, que recuerda con mucho cariño todas esas palabras que, cuando llegó a Madrid, dejó de usar.
"Dejé de usar estas palabras porque nadie las entendía, se reían de mí en el instituto cuando llegué a Madrid. Sabía que tenía que hacer algo y muy deprisa empecé a dejar atrás esas palabras, es nuestra lengua materna, hablábamos así y no había otra" recordaba con mucho cariño.
Fue cuando, a partir de una cena, decidieron crear esta idea revolucionaria y tan propia de su pueblo. Y es que empezaron a cenar con sus amigos y, poco a poco, se fueron acordando de palabras y expresiones típicas de Castilblanco. Sus amigos, en lugar de reírse de ellos, se rieron con todas sus expresiones.
"Pasamos una noche muy agradable y decidimos" decía con mucho humor María Antonia. Y sí, entre esas palabras, hay una que podría ser, directamente, extensible a toda España.
La palabra propia de este pueblo que amenaza con instalarse en España
Florencio Luengo es profesor de lengua y presidente de la agrupación “Tesoro del Cerro” que está llevando a cabo la acción de este diccionario y nos explicaba el significado de todas estas palabras. Él, además, explicaba por qué decidió meterse en todo este "ajo".
"Cuando llegaron con la idea fue una oportunidad muy interesante, era un palo muy de actualidad, hay que ayudar al desarrollo rural. Lo estamos intentando. Somos enamorados de nuestra tierra" decía Florencio.
Tanto, que nos explicaba algunas palabras y expresiones típicas. Por ejemplo, ajocinar, que es "darse de bruces, es golpearse y caes de boca contra el suelo. Si te ibas a otro pueblo más culto, te situaban como algo vulgar y ordinario, ni te cuento salir a Madrid" decía cuando explicaba esta palabra.
Ostincana, es la expresión de asombro. "Intentamos hacer un repaso a todo esto, por qué hablamos así" decía Florencio, y pensaron en esta palabra en concreto.
Pero si hay una que pueda ser extensible, esa es tupitanga, que es "rebosar de comer o de beber, hartarse". Por eso, decían Pilar Cisneros y Javi Nieves que era "buenísima" y que podría ser utilizada en toda España.
Igual pasa con arregostarse, que es "acostumbrarse a lo bueno".