En 'La Tarde'

"Quitamos piedra por piedra de la escuela, había gritos por todos lados"

Mónica trabaja en una clínica veterinaria al sur de México D.C. justo al lado de la escuela infantil que se desplomaba causando la muerte a  37 personas, 32 son niños y cinco adultos.

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

1 min lectura

El derrumbe del Colegio Enrique Rébsamen en Ciudad de México y la muerte de los 32 niños y cinco adultos que se encontraban en su interior ha impresionado a todo el mundo. Estas muertes se suman a las 181 que también ha dejado el terremoto de 7,1º en la escala de Richter que ha afectado a México.

Las tareas de rescate se han extendido a lo largo de la noche en esta escuela del sur de la capital, uno de los cerca de 40 edificios que se derrumbaron en la capital. Mónica trabaja en una clínica veterinaria en las proximidades de la escuela a donde acudieron decenas de personas a ayudar, "fue un  descontrol total, había tanta gente intentando ayudar que al ser tantos era imposible organizarse, eran gritos por todos lados, era imposible el orden", relata la joven en 'La Tarde'.

"Llevamos botes para poder recoger los escombros y fuimos a quitar piedra por piedra", dice Mónica que recuerda aquel momento con pavor, "sentimos el terremoto, la gente corrió hacia la escuela para ver a sus hijos, regresó una compañera del trabajo a la clínica que me dijo, la escuela se cayó y fuimos a ayudar".

Temas relacionados