Cisneros a las 15 horas: "Las autoridades deberían tomar medidas de precaución muy serias por las riadas"

 Madrid sufrió ayer una gota fría de proporciones desconocidas. La virulencia de la tormenta se cebó especialmente en los pueblos del Sur de la Comunidad y verdaderamente fue impresionante ver las calles de municipios como Arganda del Rey convertidas en ríos de agua y granizo llevándose e todo a su paso. Hasta Madrid Capital sufrió consecuencias graves por culpa del aguacero y el transporte se vio claramente afectado: cortados tramos de la M 40 y M30 las dos carreteras de circunvalación más importantes de Madrid y quedaron inutilizadas durante horas 6 lineas de metro. Llegar en coche a casa también se convirtió en una misión peligrosa y difícil. La gota fría ahora rebautizada como DANA: depresión atmosférica aislada en niveles altos, no es un fenómeno nuevo y tormentas de verano las ha habido toda la vida pero los expertos si tienen consenso ya en afirmar que se están produciendo algunos cambios como consecuencia del calentamiento global, el famoso cambio climático. Jorge Olcina director del laboratorio del clima en la Universidad de Alicante y colaborador de COPE nos ha contado ya en alguna ocasión que los patrones de precipitación han cambiado. Ahora las lluvias torrenciales pueden ocurrir en cualquier época y en cualquier lugar. Aunque estamos en un año muy seco, no se puede constatar que en general llueva menos pero sí que llueve menos días y que cuando lo hace es más intenso. Explicaba también Olcina que el calentamiento global extiende la posibilidad de que se de gota fría durante nueve meses al año. Si esta es la tendencia y parece claro que sí, las autoridades deberían tomar medidas de precaución muy serias ante la posibilidad de la mayor frecuencia de riadas en cualquier punto de nuestra geografía y en cualquier época del año.