"La inmigración es una cuestión a la altura del Estado, pero el Estado no acaba de estar a la altura de esa cuestión"

La directora de 'La Tarde' analiza la cuestión migratoria, que es de las primeras preocupaciones de los españoles

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Hablando de inmigración, vamos a terminar el año igual que empezó. Sin ningún tipo de solución y sin ningún tipo de acuerdo migratorio, a pesar de que este asunto sea la principal preocupación de los españoles. 

A lo mejor es por eso, precisamente, por lo que nada acaba de cuadrar, porque es demasiado suculento para hacer política de confrontación.

A falta de 15 días para cerrar el año, han llegado a Canarias casi 44.000 migrantes, un 20% más que el año pasado. También es muy notable la entrada de personas por la frontera de Ceuta.

En las últimas 24 horas, Canarias está viviendo una nueva oleada con la llegada de 600 personas, la mayoría a la isla de Lanzarote que se ha visto desbordada en su capacidad de acogida. Esta pasada madrugada, más de 100 personas han dormido en las carpas improvisadas en Arrecife.

No se puede abordar de forma individual por las comunidades. Para tratar este asunto es necesaria una política común, pero ese liderazgo estatal no se ejerce. Para que te hagas una idea, la última conferencia de presidentes autonómicos llevaba 3 años sin convocarse y cuando se ha convocado no ha servido para desbloquear un acuerdo en materia migratoria.

Lo que ocurre después es que cada región va por su lado y generando sus propias dinámicas, en algún caso totalmente negativas.

      
             
      

El ejemplo más claro lo estamos viendo en Extremadura, donde el gobierno y los presupuestos de María Guardiola (del PP) están bloqueados por Vox tras la ruptura de negociaciones.

El detonante fue precisamente la propuesta de Vox para realizar consultas en los municipios antes de acoger inmigrantes algo que para la presidenta extremeña es una línea roja. Así lo ha explicado en Herrera en COPE.

A esta misma hora pueden estar viajando perfectamente centenares de personas con rumbo a Canarias en un círculo difícil de romper. Se trata de una cuestión de humanidad en primer lugar, pero también es, a la fuerza, un asunto de solidaridad entre regiones porque es un problema nacional.

      
             
      

En resumen, la inmigración es una cuestión a la altura del Estado, pero el estado no acaba de estar a la altura de esa cuestión.