Pilar García Muñiz sobre el drama migratorio: "Europa debe actuar de forma única, si no las mafias siempre encuentran una salida"

Solo han llegado casi 300 personas a los puertos de Canarias mientras en Bruselas se debate, mejor dicho, se discute, por enésima vez la política migratoria. Te puedes imaginar lo que cuesta encontrar una posición común cuando los problemas son muy diferentes según los estados y ahora mismo a España le toca parar el golpe, especialmente en Canarias.  

Acaban de salir los últimos datos de Interior sobre inmigración irregular. Hasta el día de ayer, habían llegado a nuestras islas atlánticas casi 33.000 personas este año, es un 40% más que el año pasado en esta misma fecha.

Entre ellos, ha llamado la atención un cayuco que llegó el pasado lunes al puerto de El Hierro. En el viajaba una familia afgana de 10 miembros, incluidas 3 niñas pequeñas.

Basta con buscar en Internet la distancia que hay desde Kabul a Canarias para hacerse idea de la magnitud del viaje, de la odisea. Son más de 10.000 kilómetros y eso si hubieran venido atravesando Europa, pero lo han tenido que hacer a través de África para evitar controles.

El viaje de esta familia comenzó hace más de 3 años, en 2021, cuando los talibanes retomaron el poder en Afganistán.

Abandonaron su hogar y se fueron moviendo por diferentes puntos de Afganistán. Luego pasaron a Irán y de allí se dispusieron a atravesar África a lo ancho. 10 personas de una misma familia, más de 3 años de periplo sin rumbo fijo.

Estuvieron 3 meses en Guinea y otros 3 en Mauritania hasta que el 9 de octubre consiguieron embarcar en un cayuco rumbo a Canarias donde llegaron en la noche del pasado lunes. Cómo sobre vivieron, nadie lo sabe.

No llegaron solos a las islas, en esa misma embarcación viajaban otras 53 personas procedentes de Pakistán. Podemos decir que era un viaje que las mafias habían organizado para migrantes asiáticos. No estamos hablando de coger aviones, estamos hablando de decenas de miles de kilómetros atravesando países africanos y navegando en el Atlántico.

Lo curioso es que es la segunda vez en dos meses que llega una embarcación de este tipo a Canarias, con personas que salieron de Pakistán, Bangladesh o Afganistán.

Esto está dando que pensar a las autoridades españolas. Interior está tratando de comprobar si las mafias están modificando las rutas porque tradicionalmente esa entrada a Europa desde Asia se hacía a través de los Balcanes o bien desde Libia hacía las costas italianas.

Ir por Canarias supone un rodeo considerable que no se debe a un capricho, sino a que se han endurecido las condiciones de entrada en otros países, principalmente Italia. Curiosamente Italia es el país que está deportando migrantes hacia campos de internamiento en Albania. Y un modelo similar al italiano es el que hoy se discute en Europa.

Como si fuera la pescadilla que se muerde la cola, he terminado en el mismo sitio que comencé esta portada. En Bruselas. Es el ejemplo más claro de que todo está conectado y de que Europa debe actuar de forma única, porque si no las mafias siempre encuentran una salida.