La ciencia aclara cuándo es mejor hacer ejercicio, por la mañana o por la tarde: "Un beneficio adicional"
En 'La Tarde', el profesor investigador en Ciencias de la Salud de la Universidad Loyola Andalucía explica que hacer ejercicio a estas horas del día ayuda a controlar el azúcar
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Cada vez son más las personas que se animan a hacer ejercicio físico, bien sea al aire libre o acudiendo al gimnasio. Y no es de extrañar, pues nuestro estilo de vida actual nos ha llevado a ser cada vez más sedentarios, y esto es algo que preocupa cada vez más, ya que enfermedades como la diabetes y el colesterol han aumentado notablemente.
El caso es que no todo el mundo realiza ejercicio a la misma hora, y es aquí donde el debate está servido: ¿tienen razón los madrugadores que van al gimnasio antes de trabajar para empezar el día lleno de energía, o aquellos que optan por machacarse después de trabajar para liberar tensiones, cuando ya se pone el sol? Sin duda, esta pregunta se ha convertido en un tema de gran interés en la comunidad científica.
¿Hay una hora mejor que otra?
Según un estudio publicado por Sports Medicine, el ejercicio por la tarde resulta más beneficioso para la salud cardiobascular, y también es mejor para las personas con diabetes tipo 2, ya que ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre. Pero también es cierto que el ejercicio por la mañana también tiene beneficios, como mejorar la capacidad de atención, la memoria y la toma de decisiones.
Rafael Casuso, profesor investigador en Ciencias de la Salud de la Universidad Loyola Andalucía, explicaba que "el cuerpo está sujeto a unas oscilaciones diarias, que vienen equidistadas por la luz del día y la noche, y sabemos que hacer ejercicio por la tarde es mejor para reducir los niveles de glucosa o los niveles de lípidos triglicéridos en sangre". Aunque todavía está bajo investigación, "a nivel estadístico la hipoglucemia ocurre más a menudo por la tarde".
Pero vaya por delante una cosa… Al final hacer deporte es siempre bueno a cualquier hora del día, "otra cosa es que tengamos un beneficio adicional por la tarde" aclaraba. De hecho, han realizado "estudios en colegios donde entre cada clase hacían 10 minutos de ejercicio rápido, y se vio que se favorecía la atención y el rendimiento cognitivo de los alumnos, y sin necesidad de salir del propio aula en el que imparten la clase".
Tiempo de ejercicio y alimentación previa
En cuanto al tiempo que debemos realizar ejercicio, "la recomendación está más o menos en una hora diaria, todo epende de la intensidad, cuanta más intensidad menos cantidad de ejercicios, y se va jugando con eso". Esto por supuesto varía según la edad de la persona, ya que la actividad física de un niño (basada en cognición, equilibrio, carrera, interacciones con los compañeros) no es la mismo que tiene que hacer un adulto (fuerza y peso).
También es importante tener en cuenta que "si vas a hacer ejercicio fuerte e intenso, es recomendable dejar mínimo dos horas antes de la hora de acostarse, para dejar al cuerpo que llegue a su estado de reposo de nuevo, y así tener una cantidad y calidad de sueño efectiva".
La ingesta de comida también es un gran debate entre las personas que realizan deporte, pues muchos no tienen muy claro si es mejor ir en ayunas, desayunado, o si es más tarde, cuánto tiempo hay que esperar para empezar a realizar ejercicio. "La clave está en el qué y en el cuánto" aclara. "Por ejemplo, si vas a hacer un ejercicio intenso y 15 minutos antes te tomas un dulce que suba la glucosa en sangre hay que tener cuidado, porque puede provocar hipoglucemia". Casuso aclara que "debemos consumir la comida durante la hora y media anterior de realizar ejercicio y poca cantidad".