La sonda Parker enviada al sol deberá soportar temperaturas de 1.400 grados

Después de tres intentos fallidos, la NASA ha logrado lanzar con éxito al espacio la sonda Parker con el objetivo de aproximarse lo máximo posible al Sol. A las 3:31 hora local, las 9.31 hora Española del pasado domingo, la sonda despegó de la base de Cabo Cañaveral, en Florida. Nunca antes una nave había intentado acercarse tanto al Sol para procurar conocer mejor su naturaleza. Uno de los científicos que ha participado en la creación de la Sonda Parker es el astrofísico español David Lario, que ha relatado en 'Mediodía COPE' el objetivo principal de la misión.

En primer lugar, David Lario ha confirmado que uno de los objetivos principales es estudiar la corona solar, porque según han investigado durante años, desde el 1958 exactamente, "la corona presenta una temperatura más alta que la superficie del sol y esto es uno de los grandes misterios que aun no conocemos". David lo ha explicado de forma sencilla con una comparación en la que a medida que te acercas a un cuerpo caliente la temperatura aumenta, y si te alejas, la temperatura desciende, por lo tanto, no es normal que la corona tenga una temperatura mayor que la superficie del sol.

Además, ha añadido que otra de las pretensiones es estudiar el viento solar, "saber cuales son los mecanimos que lo aceleran". El astrofísico español ha concretado que para que fuera exitosa la misión "se ha diseñado un escudo térmico especial que va delante de la sonda, siempre de cara al sol, para que pueda proteger los instrumentos científicos que eatán en el cuerpo de la sonda", porque, como ha aclarado, "la temperatura que se espera delante de la sonda es de alrededor de 1.400 grados".