Pilar García Muñiz, sobre la polémica de Bolonia: "Se niegan a cualquier transfusión de personas vacunadas"

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Este jueves la mascarilla dejará de ser obligatoria en la calle salvo que no podamos evitar mantener la distancia de seguridad. Como si fuera un trabalenguas, de nuevo volveremos a la normalidad, de la nueva normalidad.

El Consejo de Ministros acaba de ratificar lo ya sabido que desde el jueves, adios a la mascarilla en la calle y también un matiz importante. La mascarilla tampoco será obligatoria en el patio de los coelgios desde el próximo jueves.

Y en los niñós, precisamente, vamos a seguir fijándonos desde la clave de la vacunación. Hoy lo estamos contando en nuestro informe COPE. El gobierno había marcado este inicio de febrero para tener al 70% de la población infantil vacunada y según los datos de Sanidad, ahora mismo ese porcentaje ronda el 55%.

¿A qué se debe este frenazo? Segun nos dicen los expertos una causa probable es que muchos de los niños que debían de recibir la primera dosis se han infectado con ómicron y ahora deben esperar al menos los 5 meses establecidos antes de la vacunación.

Más difícil de explicar son las notables diferencias que se aprecian entre las Comunidades Autónomas a la hora de la vacunación infantil. 9 comunidades están por encima de la media y otras 8, entre ellas Madrid y Cataluña están por debajo.

Ahora bien, nada comparable a la situación de Ceuta, Melilla y Baleares en ninguno de los casos llegan al 40% de vacunación y están muy por debajo de comunidades como Galicia o Asturias donde rondan el 80.

Precisamente hablando de vacunas y de infancia. Atención a esta historia que nos llega desde el norte de Italia, desde Bolonia. Una zona en la que la semana pasada estaban nuestros compañeros de la Tarde de COPE ya que allí abunda el negacionismo.

La historia es la siguiente: un niño de 2 años de Módena tiene que ser sometido a una operación urgente de corazón y los padres, antivacunas, se niegan a cualquier transfusión de sangre de personas que hayan sido vacunadas. Solo quieren sangre de donantes no vacunados. Sin esa transfusión, la operación urgente no se puede realizar.

El hospital considera que la situación es crítica y ha recurrido a un juez para que autorice llevar a cabo la operación incluso en contra del criterio de los padres, que se dedican a buscar entre conocidos alguien que no haya recibido la vacuna y tenga un plasma compatible. Pero claro, los protocolos médicos no permiten elegir al donante y abrir ese proceso ralentizaría esta operación urgente.

Es una situación endiablada, retorcida y paradójicamente, a pesar de la cuenta atrás para este niño de 2 años, todo se está viendo complicado por la intervención de la justicia que sin embargo es imprescindible. Lo sé, es difícil de comprender cómo se puede llegar a una situación así cuando lo que está en juego es la vida de un crío de 2 años, pero ojo, es un asunto que hoy contamos en Italia, en Plena Europa, muy cerca de España no perdamos de vista que mañana algo parecido podría ocurrir en nuestro país.