Pilar García Muñiz, sobre la Ley de Vivienda: "Sólo siembra inseguridad jurídica y desincentiva la inversión"

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Bienvenido a Mediodía COPE en este miércoles en el que sigue coleando esa ley de la vivienda que quiere aprobar el gobierno de Pedro Sánchez que, al final, ha cedido una vez más a las exigencias de su socio de Unidas Podemos, que llevaba dos años presionando con un control del alquiler. Este es otro tanto que se apunta Yolanda Díaz, que ya ha ganado unos cuantos pulsos a los ministros socialistas. Recientemente, también, la subida del Salario Mímino Interprofesional. De momento, esa ley es un solo un pacto en el marco de la negociación interna que han tenido en el Gobierno para sacar adelante los Presupuestos Generales.

Es decir que queda mucho recorrido aún por delante para que se salga delante y entre en vigor. Tiene que pasar por la primera lectura del Consejo de Ministros, ir al Congreso, pasar por una comisión, se introducirán enmiendas, luego volverá al Pleno del Congreso. Vampos, que no es para pasado mañana. Va para largo. Y vamos a ver cómo queda al final, porque muchas de las cosas que pretende, depeden, además, en última instancia de la CCAA y los ayuntamentos.

De momento, se sabe que es una ley intervencionista, pero solo para los grandes grandes tenedores. La mayoría son fondos o empresas que son propietarios de 10 o más viviendas a quienes se les retira los beneficios fiscales y a los que se podrá obligar a bajar el alquiler en las zonas tensionadas, en las que hay más demanda y el precio está más alto: cuidades como Madrid, Barcelona o municipios turísticos como Málaga o Mallorca.

Realmente, los grandes tenedores son un porcentaje muy bajo en nuestro país. Respresentan solo el 5 por ciento del mercado de alquiler. El resto, son pequeños propietarios que tienen una segunda vivienda, que la alquilan y con eso obtienen unos ingresos extras. ¿Qué pasa en estos casos? ¿Cómo les va afectar la ley? En teoria a ellos no se les va a imponer un precio determinado, se libran del control. Pero si bajan ese precio recibirán bonificaciones como una deducción del 90 por ciento en el IRPF en alquiler de viviendas.

Además, los ayuntamientos que lo deseen podrán subir el IBI hasta un 150 por ciento a las viviendas que estén vacias más de dos años. Son grosso modo las medidas más destacas de esta ley...que ataca directamente a la propiedad privada y que muchos expertos creen que va a tener el efecto contrario que se desea. Y la prueba la podemos encontrar en ciudades como Berlín, París, en Amsterdam, en Barcelona donde marcar el precio del alquiler no ha servido para bajar los precios, lo que ha conseguido es reducir la oferta al espantar a propietarios e inversores.

Y ese es uno de los problemas consecuencia del intervencionismo, como también lo ha sido meter mano a las eléctricas para abaratar la factura de la luz. Decisiones que solo siembran inseguridad jurídica y que desincentivan la inversión en nuestro país. Por cierto, desde el PP ya han dicho que recurrirán la futura ley en el Tribunal Constitucional y que en las Comunidades en las que gobierne, no se aplicará.

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