¿Cuánto duran los semáforos en las ciudades de España para los coches?: "Nos obligan a correr"
Todos nos paramos frente a uno cada día y muchas veces nos tenemos que armar de paciencia para superarlo, aunque dependen de los ayuntamientos
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El semáforo es una de las señales más importantes que regulan la circulación, sobre todo en zonas con una alta densidad de tráfico en las que otras señales viales no son tan efectivas. Se trata de señales luminosas que indican quién debe pasar o detenerse: en el caso de un peatón, cuándo debe cruzar una calle y en el caso de un conductor, cuándo debe esperar porque es el turno de los peatones o cuándo circular. Todo ello ayuda a garantizar la seguridad de unos y otros. En 'Poniendo las Calles' ponemos atención a la duración que tienen, una duda que te surge cada vez que te paras frente a uno.
Tan queridos cuando los encontramos en color verde, como odiados cuando están en rojo, los semáforos se han convertido en un complemento indispensable al tráfico en las ciudades. Su historia se remonta 155 años atrás, cuando de la mano del inventor John Knight se instaló el primer semáforo en Londres, frente al Parlamento de Westminster. En este caso era accionado manualmente por un policía local y funcionaba con dos lámparas de aceite. La explosión de una de ellas hizo que dejase de usarse hasta que en 1914 se instaló el eléctrico, que funcionaba mediante un juego de luces en Cleveland, Estados Unidos.
Lo que duran los semáforos
Alfonso García cuenta en 'Poniendo las Calles lo que duran. Los semáforos tienen un tiempo estipulado para el paso de los vehículos y de las personas. En España, la duración de los semáforos suele oscilar entre los 12 y los 90 segundos, todo depende del color. Generalmente, los peatones tienen unos 12 segundos para cruzar el paso en verde. El color rojo, por su parte, tiene una mayor duración: puede llegar hasta los 90 segundos. Estos lapsos han sido establecidos de esta forma para regular el tráfico, sobre todo en zonas de elevada intensidad, y para preservar la seguridad vial.
Recientemente, la DGT ha abierto el debate sobre hasta qué punto son seguros, al menos en ciertas circunstancias, los semáforos con ámbar parpadeante que pueden dar lugar a equívocos. En un artículo encabezado con el esclarecedor 'El peligro está en el ámbar', su revista oficial reflexiona sobre hasta qué punto pueden suponer un riesgo. La organización británica Safer Roads Foundation ha puesto su atención en España, único país en el que, según la organización, se sigue aplicando esa doble indicación. Por ahora, no se plantean eliminar esta luz.
La ciudad donde duran más
Esta circunstancia también provoca muchas multas, por ese intervalo en el que te saltas el semáforo o no. Esto es algo bastante frecuente debido a la gran cantidad de semáforos que encontramos en las principales ciudades españolas, como puede ser Madrid o Barcelona. Sin embargo, ninguna de las dos mencionadas anteriormente son consideradas como las que más semáforos tienen. Concretamente, otra localidad de España tiene el honor, si se puede llamar así, de ser la segunda del mundo con más señales de este tipo.
El primer semáforo de Valencia se instaló en el centro de la ciudad en el mes de junio del año 1930. Concretamente, se puso en la Plaza de la Reina, una de las más concurridas y por las que más tráfico pasa. Desde entonces, la ciudad cuenta con un semáforo por cada 750 ciudadanos. Este dato es el doble que en otros lugares como Zaragoza o incluso cinco veces más que en ciudades como Bilbao. En contraposición, Madrid cuenta con un semáforo por cada 2.700 personas y por su parte, Barcelona, uno por cada 2.000. Todos ellos contribuyen a la media que ha establecido Alfonso García en 'Poniendo las Calles'.