El beneficio oculto que revela una neuróloga de la siesta en la salud de una persona que ha dormido las horas suficientes

Los españoles duermen poco, en torno a siete horas, sobre todo, la gente joven y a veces incluso menos, tal y como revela Ana Fernández Arcos

José Manuel NietoCarlos Moreno 'El Pulpo'

Publicado el

3 min lectura

Los españoles, como muchos de nosotros, sabemos que el sueño es un pilar fundamental para mantener nuestra salud física y mental. Sin embargo, la realidad es que, según la doctora Ana Fernández Arcos, neuróloga y experta en trastornos del sueño, los españoles no descansamos lo suficiente. En Poniendo las Calles con Carlos Moreno 'El Pulpo', la doctora profundizó en la importancia del descanso nocturno, las consecuencias de no dormir las horas adecuadas y, sobre todo, el beneficio oculto que puede revelar la siesta para las personas que descansan lo suficiente por la noche.

Ana Fernández Arcos comenzó explicando que, en general, los españoles duermen una media de siete horas diarias, y no es raro que los más jóvenes lleguen a dormir incluso menos. Este déficit de horas de sueño afecta negativamente a nuestra salud y bienestar, con consecuencias tanto físicas como emocionales. Tal como detalló la doctora, "el sueño es un pilar de la salud, y aunque pasemos un tercio de nuestra vida durmiendo, a veces no le damos la suficiente importancia".

El sueño reparador, ese que nos permite levantarnos renovados y con energía, es crucial para mantener un adecuado funcionamiento de todos nuestros sistemas. Un descanso de calidad, como el que deben disfrutar los adultos entre siete y nueve horas, nos permite recuperarnos tanto física como emocionalmente. La doctora señaló que el sueño adecuado ayuda a prevenir lesiones, mantiene nuestro sistema inmunológico activo y regula la función cardiovascular. A nivel cognitivo, un buen descanso es esencial para mantener una buena memoria, atención y equilibrio emocional.

Alamy Stock Photo

Un turista se echa una siesta rápida en un banco a la sombra junto al Alcázar de los Reyes Cristianos en Córdoba

El sueño no solo es una cuestión de cantidad, sino también de calidad. Durante la noche, nuestro cuerpo no se limita a reposar: se repara a nivel celular, regula hormonas, refuerza el sistema inmunológico y mejora la salud del corazón. "El sueño no es solo reposo; es fundamental para todos los sistemas corporales", aseguró la neuróloga. Esta visión pone de manifiesto lo crucial que es dormir bien para evitar problemas como la fatiga crónica, la falta de concentración o los trastornos emocionales que afectan a tantos de nosotros debido a la falta de descanso.

La siesta

En este contexto, la siesta, esa tradición tan española, emerge como un punto clave. Aunque muchas veces se asocia con el descanso durante el día, la doctora Fernández Arcos subraya que la siesta puede ser muy beneficiosa, especialmente si se realiza correctamente. Para las personas que duermen las horas necesarias por la noche, una siesta corta (de unos 20 o 30 minutos) tiene efectos positivos en la memoria y la concentración. Sin embargo, si se toma en exceso o se realiza en un mal momento, puede generar efectos contraproducentes, como la sensación de aturdimiento y cansancio por despertar de un sueño profundo.

Lo que se debe evitar es utilizar la siesta como un remedio para compensar la falta de sueño nocturno. La doctora explicó que si una persona duerme menos de siete horas por la noche, la siesta puede ayudar a paliar los efectos negativos de este déficit, pero no sustituye la importancia de un buen descanso nocturno. Es fundamental restablecer el equilibrio y permitir que el cuerpo y la mente disfruten de un ciclo completo de descanso cada noche.

Otro aspecto relevante que destacó la neuróloga es la relación entre la falta de sueño y el aumento de trastornos del sueño, como el insomnio, y el consumo de medicamentos para dormir. Según estudios recientes, España está a la cabeza del consumo de sedantes y somníferos en Europa. La doctora recomendó que, antes de recurrir a estos tratamientos, es esencial crear un ambiente adecuado para dormir: evitar la cafeína y el alcohol antes de acostarse, mantener una rutina estable, y crear un entorno de oscuridad y silencio en la habitación.

Alamy Stock Photo

Un joven durmiendo en un cómodo sofá en una sala de estar con un libro naranja apoyado en su pecho, creando un ambiente tranquilo y relajado en el interior.

Finalmente, Ana Fernández Arcos subrayó que, a pesar de la creciente conciencia sobre la importancia del sueño, aún queda mucho por hacer. En muchas ocasiones, nuestros estilos de vida y rutinas diarias nos impiden obtener el descanso que nuestro cuerpo necesita, como bien señaló durante la entrevista: "El sueño es tan esencial para nuestra vida que, si no fuera así, lo habríamos eliminado durante la evolución".