A partir de 2025 las motos en España podrán conducir por una vía que hasta ahora era prohibido: con condiciones

Esta buena noticia pretende mejorar la fluidez, en este caso, de la circulación, pero tendrán que hacerlo a una velocidad no superior a 30 kilómetros hora

José Manuel Nieto

Publicado el

3 min lectura

      
      
             
      

A partir de 2025, los motociclistas en España podrán circular por los arcenes de las vías, una opción que hasta ahora estaba prohibida para las motos. Esta medida, que forma parte de una modificación en el reglamento de circulación, busca mejorar la fluidez del tráfico y facilitar la movilidad de los vehículos en situaciones de retenciones. Sin embargo, no se trata de una libertad total para circular por estas zonas: la medida viene acompañada de importantes condiciones que los motoristas deberán respetar para poder aprovechar este nuevo cambio normativo.

El artículo 36 del reglamento de circulación, que entrará en vigor en 2025, establece que las motos podrán circular por los arcenes de la derecha en todo tipo de vías. Esto, en principio, parece una excelente noticia para los motociclistas, quienes a menudo se ven atrapados en el tráfico denso, especialmente en horas punta. Sin embargo, esta nueva normativa viene con un par de restricciones que tienen como objetivo garantizar la seguridad y evitar accidentes:

Límite de velocidad: Las motos no podrán circular por el arcén a una velocidad superior a los 30 km/h. Este límite está diseñado para evitar que las motos se deslicen a una velocidad peligrosa, especialmente cuando el tráfico esté detenido o muy ralentizado. El objetivo es que los motociclistas puedan avanzar, pero sin poner en riesgo a otros vehículos, ni a ellos mismos.

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El tráfico pasa por delante de las bicis eléctricas aparcadas de un servicio de sharing en Barcelona, ​​para facilitar las necesidades de transporte y reducir la contaminación

Respeto a la prioridad de otros vehículos: En los arcenes, las motos deberán respetar la prioridad de paso de los vehículos que están obligados a circular por el arcén, especialmente las bicicletas. Esto implica que, en caso de que una bicicleta o un vehículo que tenga permitido circular por el arcén se cruce con una moto, ésta deberá ceder el paso.

A partir de 2025

El principal objetivo de esta modificación en la normativa es mejorar la fluidez del tráfico. Las motos, al ser vehículos más ágiles y pequeños, tienen la capacidad de moverse entre los vehículos y de sortear con mayor facilidad los atascos, especialmente en situaciones de tráfico lento o retenciones.

Permitirles circular por los arcenes, siempre y cuando se respeten las normas de seguridad, debería facilitar que el tráfico fluya con mayor rapidez y sin que las motos se queden atrapadas detrás de los vehículos, lo que podría resultar en un riesgo tanto para ellos como para los demás conductores.

      
             
      

Además de permitir que las motos circulen por los arcenes, el reglamento de circulación también sufrirá otras modificaciones importantes que afectarán a la seguridad y la organización del tráfico en general.

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Un motociclista sentado en su scooter a punto de salir

A partir de 2025, se prohibirá adelantar en condiciones de nieve, hielo o en autopistas y autovías cuando la visibilidad sea muy reducida o peligrosa. Esto tiene como objetivo aumentar la seguridad en situaciones de riesgo, donde adelantar puede resultar especialmente peligroso.

con condiciones

Otra de las modificaciones importantes será la creación de una zona exclusiva para vehículos de emergencia en el carril izquierdo de las autopistas y autovías. Este carril será reservado para situaciones de emergencia, como los vehículos de quitanieves o de asistencia en carretera, y no podrá ser utilizado por otros vehículos en condiciones normales.

      
             
      

A partir del próximo año, los conductores tendrán la obligación de abrir un pasillo central en caso de retenciones para facilitar el paso de los vehículos de emergencia, como ambulancias, bomberos o coches de policía. Esta medida está pensada para mejorar la eficacia de la respuesta ante emergencias y garantizar que los servicios de rescate puedan llegar más rápidamente a los lugares donde se necesiten.