Se celebrará el domingo, 14 de enero

La Conferencia Episcopal presenta la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado

Bajo el lema Acoger, proteger, promover e integrar a los emigrantes y refugiados, esta Jornada pone el acento en 20 medidas concretas, elaboradas por el Vaticano para que formen parte de los Pactos Globales sobre migrantes y refugiados que se van a acordar en septiembre en la Asamblea General de la ONU

Natxo de Gamón

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Monseñor Juan Antonio Menéndez, presidente de la Comisión Episcopal de Migrantes, ha presentado en nuestro país la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado, que se celebrará el próximo domingo, 14 de eneroMonseñor Menéndez ha desgranado esos cuatro verbos que componen el lema y que llevan implícitos las 20 medidas con las que se pretende influir en los Pactos Globlales.

Acoger invita a contribuir a construir canales y legales para los migrantes y los refugiados. Entre las medidas asociadas a este verbo, se encuentran, por ejemplo, evitar los procesos de “devolución en caliente”; ampliar los cauces para la migración legal, concediendo, por ejemplo, visados por razones humanitarias.

Proteger nos recuerda la necesidad de garantizar los derechos y la dignidad de los migrantes y de los refugiados, y bajo esta palabra encontramos propuestas como adoptar en los países receptores políticas que eviten la explotación o el trabajo forzoso o recordar a los Estados sus obligaciones respecto a los menores migrantes, en especial, aquellos que se encuentran cerca de la mayoría de edad.

Promover nos invita a fomentar el desarrollo humano integral de los migrantes y refugiados, e incluye propuestas como garantizar el acceso a la educación a migrante y solicitantes de asilo o una política más flexible de reconocimiento de títulos académicos y profesionales.

Por último, integrar se refiere al enriquecimiento de las comunidades mediante una mayor participación de los migrantes y los refugiados. A este verbo le acompañan medidas como la creación de leyes para conceder la nacionalidad a todos los nacidos en territorio nacional o adoptar políticas que promuevan una visión positiva de los migrantes entre los residentes en el país.

Monseñor Juan Antonio Menéndez también ha señalado cómo es la situación concreta de nuestro país. El obispo de Astorga valora positivamente el trato que reciben los migrantes por parte de la sociedad española. Un trato que está alejado de “esos brotes de xenofobia que hay en algunos países del centro de Europa”. Aunque el presidente de la Comisión Episcopal de Migraciones ha señalado que todavía hay cosas en las que tenemos que mejorar: acabar con el modelo de los Centros de Internamiento de Extranjeros -los llamados "CIE", terminar con las “devoluciones en caliente” que se producen en las fronteras de Ceuta y Melilla y cumplir con el compromiso del Gobierno de acoger a los 17.337 refugiados a los que se comprometió antes del 26 de septiembre de 2017, cifra que no ha llegado a los 2.000 acogidos.