Carta del obispo de Tarazona: «Estamos en la reserva»

Hoy, domingo 19 de marzo, se celebra el Día del Seminario con el lema “Levántate y ponte en camino”.

El seminario es el lugar donde se forman los niños jóvenes o adultos para ser sacerdotes. En Tarazona tenemos un gran seminario, un enorme edificio construido en la época en la que eran muy numerosas las vocaciones. Pero hoy, no tiene ningún seminarista; no tenemos seminaristas en el Seminario Mayor que son los que realizan los estudios eclesiásticos; en el Seminario Menor este curso ha comenzado un estudiante de la ESO, está en el seminario de Zaragoza lugar en que se forman los seminaristas de todo Aragón. Por esto se nos ha encendido la luz de la reserva en nuestra diócesis en lo que a sacerdotes se refiere.

Actualmente tenemos un sacerdote de 85 años en activo, 1 de 82 años, 4 de 80 años, 2 de 76 años; todos estos han superado ya la edad de la jubilación.

Entre 65 y 75 años tenemos 8 sacerdotes: 2 de 73 años, 2 de 72 años, 1 de 71 años y 3 de 65 años. El más joven de nuestros sacerdotes tiene 30 años, el último que se ordenó fue en octubre del año 2021, ya va a hacer dos años. El verano pasado se ordenó un diácono permanente. Tenemos también un grupo de sacerdotes que no pertenecen a la diócesis, pero están prestando servicio pastoral aquí, con nosotros. Se lo agradecemos profundamente a ellos y a sus diócesis por la generosidad que muestran. Gracias a ellos podemos atender varias parroquias.

Esta es nuestra situación que al no contar con relevo a corto plazo nos indica que estamos viviendo de lo recibido, viviendo de tiempos pasados. Es muy de agradecer los grandes esfuerzos que realizan los sacerdotes de cualquier edad, pero en especial los que han superado la edad de la jubilación porque he mencionado en la lista anterior a los sacerdotes que atienden parroquias, pero hay más sacerdotes con la edad de jubilación superada que están muy activos en otros servicios: archivo de diocesano, atendiendo a residencias de la tercera edad o apoyando en parroquias a los sacerdotes más jóvenes.

Es momento para que escuchemos de nuevo el lema de este año: LEVÁNTATE. Es un grito de ánimo al que se siente cansado o perezoso; que está parado al borde del camino o caído; al que se encuentra triste o con el ánimo bajo; al que está enfermo y tiene que poner de su parte para curarse.

Así nos encontramos nosotros. Necesitamos reaccionar, lo digo en plural porque es una tarea de todos: los sacerdotes con nuestro testimonio de vida y colaborando con el Espíritu en las llamadas a los jóvenes o adultos.

Las familias valorando el don del sacerdocio, creando en el hogar el clima religioso propicio para que pueda germinar la semilla de la vocación.

Los colegios, las catequesis, otros grupos y otros lugares de formación, para que en ellos se proponga de forma ilusionante y seria la vocación al sacerdocio o a la vida consagrada.

Los jóvenes, que se abran a Dios, a su llamada sin miedo, con confianza en quien todo lo puede y nunca abandona a sus hijos; que sabe recompensar con el ciento por uno al que abandona todo por entregar su vida al servicio del Reino.

Necesitamos la gracia de Dios para que cambie nuestros corazones, mueva nuestras voluntades en especial la de jóvenes o adultos para que llenos del amor de Dios deseen unirse de por vida a su proyecto de Evangelio. Nuestra iglesia de Tarazona necesita vocaciones sacerdotales, oremos todos pidiendo este don, ofrezcamos nuestros sacrificios cuaresmales para que el Señor muestre su misericordia con esta diócesis. Unamos todos nuestros esfuerzos por esta tarea.

Feliz día del seminario. Feliz día del padre.

+ Vicente Rebollo

Obispo de Tarazona