La cuaresma: una historia de generosidad

Empieza la cuaresma, el tiempo en que somos conscientes, los que nos inspira el Evangelio, que vivimos la mayor historia de amor por todos

La cuaresma: una historia de generosidad

Marisa Salazar

Publicado el - Actualizado

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Queridos amigos, a las puertas de comenzar la Cuaresma, quiero celebrar con ustedes esta gran oportunidad que nos da Jesus a los que creemos en El de vivir la mayor historia de generosidad.

Empieza el tiempo en que somos conscientes, los que nos inspira el Evangelio, que vivimos la mayor historia de amor por todos y cada uno de nosotros . Alguien que dio la vida por nosotros. Ese es el mayor signo de amor.

Una vez, una amiga y compañera del alma que iba a dejar un trabajo, que le importaba mucho por estar más cerca de su hija, cuando yo le preguntaba por qué lo hacía , me dijo :” Porque me sale del corazón, quiero que mi hija ,lo más importante de mi vida, viva que hay alguien que dejó todo por ella”.Qué maravilla, que nos quieran, que nos cuiden , que nos protejan, nos debería hacer mejores personas, más fuertes , más auténticos, más humildes y más generosos con el mundo que nos rodea.

Me gustaría iniciar mi camino por la cuaresma con ese sentimiento de cómo querer, de cómo recorrer ese camino imitando de lejos a Jesús ,luchando por cada amigo, cada compañero, cada persona que sufre , como El lo hizo con integridad ,desprendimiento, fuerza, miedo , decisión hasta la sublime e inimitable decisión de dar la vida por nosotros.

El papa Francisco en su mensaje de Cuaresma nos ha dicho que:” hemos sido salvados en la esperanza”…., que Dios y su hijo nos salva en la alegría.

Dos grandes personajes de nuestro tiempo han publicado un gran libro hablando de alegría y esperanza,.Ambos la definen y sustentan en ocho pilares: cuatro de la mente y cuatro del corazón:

Perspectiva para tomar distancia frente a la realidad , con el propósito de adoptar una visión más completa e ir más allá de nuestra propia conciencia e interés.

Humildad , que nos ayude a reconocer que siempre “somos con otros”, que nuestras fuerzas y limitaciones se sobrellevan con otros y se crecen en comunidad.

Humor , que nos hace sonreírnos de nosotros mismo pero también nos ayuda a situarnos en un terreno común .

Aceptación ,para asumir el trabajo duro que implica llevar a cabo los cambios necesarios para responder a las exigencias de la realidad y del principal objetivo que nos ocupa.

Perdón , para no olvidar nunca nuestra humanidad y que cometemos errores.

Gratitud ante cada una de las bendiciones recibidas.

Compasión para sufrir con los que sufren y luchar siempre por su bienestar.

Y por supuesto Generosidad que es el centro de nuestra humanidad y siempre contribuye a que nuestra vida tenga alegría y sentido.

Ojala nos paremos a pensar cómo es nuestra alegría, si existe, si la cuidamos ,si la vivimos con esperanza y que , por qué y por quien está sustentada.

Les deseo un camino de Cuaresma que restaure nuestro corazón de cristianos, que nos lleve a convertirnos ,a intentar ser mejores y a perdonar.

Dice también el Papa que:” la Cuaresma es sigo de conversión”.

Convirtámonos, por tanto, dando gracias por todos aquellos que seguro que tenemos en nuestras vidas, que nos hacen felices, recemos por ellos, pensemos en los que, a lo mejor, no han tenido a nadie, o su egoísmo no les deja verlo, que diera la vida por ellos y querámoslos como nunca ,desde lo hondo , quitando los adornos, con todo lo que somos capaces de dar.

Recemos de corazón por ellos y demos gracias a Dios por tener la suerte de vivir esta maravillosa experiencia de que Alguien nos quiso tanto que dio la vida por nosotros y porque fuéramos inmensamente más felices. .