Fray Pedro González, comisario en Tierra Santa: "De los 30.000 muertos en Gaza, la mitad son niños"
'ECCLESIA al día' ha analizado en un programa especial la situación en Tierra Santa después de que el cardenal Pizzaballa celebrara una Misa por la paz en Barcelona
Publicado el - Actualizado
4 min lectura
“Con pena y preocupación”. Así está viviendo el comisario de Tierra Santa en España, Fray Pedro González, el recrudecimiento de la guerra en Tierra Santa, más de cuatro meses después del atentado de Hamás en Israel.
Este domingo, unos 2.000 fieles, la mayoría de ellos jóvenes, rezaron por la paz en Tierra Santa en la basílica de la Sagrada Familia durante la octava edición de 'Sentir la Cruz'. La Eucaristía estuvo presidida por el patriarca latino de Jerusalén, el cardenal Pierbattista Pizzaballa.
Para el franciscano, se trata de un signo de que en la juventud existe preocupación por estas cuestiones: “Me alegra que haya este movimiento, es un signo de que no hay indiferencia en la juventud sobre el tema de la paz y en concreto en Tierra Santa”, ha manifestado Pedro González durante 'ECCLESIA al día especial Siente la Cruz Tierra Santa'.
Tierra Santa vive un colapso económico ante la ausencia de peregrinaciones
Y es que para Fray Pedro González el resurgir del conflicto entre Israel y Palestina le retrotrae a los primeros compases del siglo XXI en la zona, lo que traer consigo la muerte de inocentes y unas consecuencias económicas muy graves, ya que las peregrinaciones se han cancelado: “Los cristianos de Jerusalén y de toda Tierra Santa viven económicamente de las peregrinaciones, porque son nuestros chóferes, los que atienden en restaurantes, hoteles, santuarios...”
El propio Pedro González ha recordado que desde finales de septiembre no puede regresar a Tierra Santa. La última vez fue un con grupo de Granada: “Tendría que haber ido de nuevo el 10 de octubre, pero ya no pude. Teníamos cuatro o cinco grupos peregrinando uno en Tierra Santa y el resto en Jordania. Volvieron entre ruidos de bomba. Los otros grupos se encontraban en Jordania. No pasó nada porque puedieron evacuarse algunos de ellos sin terminar la peregrinación, pero ya volverán”, ha señalado el comisario de Tierra Santa en España.
"Hay recelos y sospechas entre las distintas comunidades"
Cuatro meses después de que estallara el conflicto de nuevo, Pedro González ha lamentado que entre las comunidades exista recelo y tensiones, lo que está impidiendo a los civiles convivir en paz o pasear libremente por las calles: “No se puede salir de la propia comunidad porque hay recelos, sospechas, no hay seguridad, no te fías de nadie, no sabes donde puede haber un infiltrado y crear problemas al grupo... Se vive una tensión que no puede seguir así mucho tiempo”.
Por ello, Pizzaballa reclamaba a la comunidad internacional y las autoridades israelíes y palestinas una solución permanente al conflicto durante la Misa en la Sagrada Familia de Barcelona. Pedro González se muestra por desgracia pesimista al respecto.
“Lo veo difícil porque este enfrentamiento lleva existiendo desde hace siglos, y aunque se recrudeció en los últimos 75 años con la creación del Estado de Israel, ya antes había enfrentamientos. El 7 de octubre hubo una explosión más de las muchas ocurridas en el último siglo”, ha recordado.
"De las casi 30.000 personas muertas en Gaza, más de la mitad son niños"
Una guerra en la que pierden todos, especialmente los menores ya que, como ha puntualizado el franciscano en este especial de 'ECCLESIA al día', constituyen la mayoría de la población en Gaza ante la falta de ancianos: “Más del 50% de la población de Gaza son menores de edad, porque ante la pobreza, falta de alimentos o de agua, hace que la esperanza de vida sea de 45 años, como en los tiempos antiguos. La natalidad sin embargo es altísima y hay gran cantidad de niños. De las casi 30.000 personas que han muerto en Gaza, más de la mitad son niños o menores de edad. Esos niños tienen un trauma terrible”, ha lamentado.
Ante este contexto, Fray Pedro González ha instado a la comunidad internacional a no mirar hacia el otro lado, así como a los medios de comunicación que parecen haber normalizado la difícil realidad que se vive en Tierra Santa desde el 7 de octubre.
“Los primeros quince días había noticias diarias, y ahora no es novedad. Hace más de cuatro meses que no es novedad y es la pena. Pasa a un segundo plano, nos acostumbramos a ello y no hay soluciones, se enquista el conflicto y conduce al sufrimiento, las desgracias... y no hablo solo de los cristianos, sino también de los palestinos, musulmanes, judíos... Es una masacre que no se contempla en un mundo de 2024”, ha añadido.