La polémica campaña contra los abusos a menores en Almería: "Es un error grave, no hay formación"
La presidenta de 'Lulacris', asociación que lucha contra el abuso infantil, asegura que es necesario concienciar para prevenir estos casos en la familia y en los centros educativos
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Un cartel polémico ha aparecido en las calles de Almería en el marco de una campaña conjunta entre el Ayuntamiento y el Ministerio de Igualdad para actuar contra los abusos, en el que aparece un niño con el eslogan 'Si dice no, no es sexo, es agresión'.
Con la imagen del menor, se da a entender que si el niño hubiera dicho 'sí', se podría mantener sexo con él, cuando la edad de consentimiento sexual se sitúa en los 16 años. El cartel ya ha sido retirado por el Consistorio almeriense, que atribuye a un error la colocación del cartel.
Para la presidenta de la asociación contra el abuso infantil 'Lulacris', Laura Cuevas, se trata de un error grave pese a que la intención de concienciar sobre los abusos infantiles es una buena iniciativa, aunque considera que quienes la ponen en marcha no están lo suficientemente formadas.
“Ha sido un cartel desafortunado y hay que tener cuidado con este tipo de mensajes que pueden llegar mal.Las personas que llevan este tipo de campañas no están preparadas para hacerlo, porque es difícil entender este fallo si estás preparado en la sensibilidad con los abusos sexuales infantiles”, ha explicado en 'Ecclesia al día'.
No obstante, ha reivindicado la importancia de que los ayuntamientos se sumen a estas campañas pero “hay que hacerlas bien, sin errores tan graves porque transmitimos un mensaje erróneo y es un tema delicado”.
Laura Cuevas sufrió los abusos sexuales de su padre biológico entre los seis y 16 años, motivo por el que se lanzó a fundar 'Lulacris': “No quería que ningún niño pasara por los traumas y secuelas que te deja de por vida”.
“Desde los ocho años los niños están viendo porno, en algo estamos fallando"
'Lulalis' ha llegado este año a un acuerdo con unos sesenta colegios para concienciar a las familias y a los centros educativos y dotarles de herramientas para actuar.
Y es que para Cuevas, se da la paradoja de que vivimos en una sociedad hipersexualizada, pero apenas se habla de sexo en las familias y en los centros: “Siempre me pregunto por qué hay que pedir autorización de los padres para dar una clase afectivo-sexual y no para Matemáticas o Lengua, cuando entre el 85 y 90% de los abusos ocurren en el ámbito familiar, y los niños que son víctimas quedan vulnerados. Por eso es importante la prevención a edades tempranas”, ha recalcado.
Por ello, ha animado a las familias a abordar este tema con sus hijos, pues de lo contrario se informarán por su cuenta: “Desde los ocho años los niños están viendo porno, en algo estamos fallando y tenemos que dar herramientas para que estas cosas no ocurran”.