Ryosai, el primer japonés en predicar el Evangelio

Conoció a San Francisco Javier en la ciudad de Yamaguchi y siguió sus pasos

Ryosai, el primer japonés en predicar el Evangelio

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

Venimos con una historia muy interesante, que @mgarit ha compartido en Twitter, sobre un hombre que, gracias a San Francisco Javier, se convirtió en el primer japonés en predicar el Evangelio.

Ryosai fue un hombre que nació en una aldea de pescadores en Shiraisi. Era tuerto, casi ciego y lisiado, por lo que no podía pescar ni hacer ningún tipo de trabajo. Después de pasar un tiempo al cuidado de unos monjes budistas, se dedicó a vagar por las aldeas cantando historias de los antiguos guerreros.

Un día de 1551 llegó a la ciudad de Yamaguchi. Tendría unos 25 años. Se detuvo ante un grupo que escuchaba con atención a dos extranjeros que hablaban a la gente. Uno era el cordobés Juan Fernández, que traducía lo que le indicaba el otro, Francisco de Javier.

Le gustó lo que escuchó, así que cuando terminaron se acercó a hacerles preguntas. Francisco vio en él lo que nadie antes: una inteligencia fuera de lo común, desparpajo y la libertad y curiosidad que le habían dado tantos años de vida errante.

Así que Ryosai acabó quedándose a vivir con él en el templo que el poderoso y culto daimio Ouchi Yoshitaka acababa de poner a su disposición para que predicaran sus cosas. Se bautizó con el nombre de Lorenzo.

Después de morir San Francisco Javier, siguió su ejemplo y se dedicó a predicar. Por el edicto del destierro de 1587 se fue a Nagasaki. Por eso Kano Naizen lo vio allí y por eso en su biombo del siglo XVI que representa la llegada de la nao de Roque de Melo a Nagasaki (1591) hay una figura que apenas se ve, este hombre que conoció a San Francisco Javier en las calles de Yamaguchi, vestido con su kimono, con el bastón de ciego y con el rosario en la otra mano.

Ryosai fue un personaje muy conocido que visitaba con frecuencia a Oda Nobunaga y Toytomi Hideyoshi (unificadores del Japón). Murió a los 65-68 años y fue el primer japonés que se dedicó a predicar el Evangelio, Lorenzo Ryosai.