El recuerdo de Mons. Fernández cuando era obispo auxiliar de Santiago: "Es muy importante que haya confesores"
En 'Diario de un Peregrino' Javier Escartin ha tenido la oportunidad de hablar con el obispo de Astorga tras visitar la catedral y conocer todos sus secretos
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El episodio de ayer, miércoles 18 de agosto, de ‘Diario de un Peregrino’ ha visto nuestro peregrino, Javier Escartín, llegar a la ciudad de Astorga.
Allí, tras visitar la Catedral y descubrir sus secretos gracias a la visita realizada con el deán de la catedral, Francisco Javier Gay, pudo encontrarse con el obispo de la diócesis de Astorga, Mons. Jesús Fernández.
"La vivencia del Camino tiene que ser caminando"
El obispo confesó haber hecho el Camino de Santiago: “Hace unos años lo hice en bicicleta, reconozco que no es el autentico Camino. Tiene una ventaja que es la de llegar en 10 días, pero creo que hay otra diferencia de fondo: la oportunidad que te da, caminando, de hablar, contemplar y rezar más. Con la bicicleta vas màs fatigado y es difícil hablar o contemplar porque vas muy atento a todo. La vivencia del Camino tiene que ser caminando”.
Sobre el Camino de Santiago, Mons. Fernández, cree que “históricamente ha sido una oportunidad para la revisión interior, encontrarse con uno mismo y espiritualmente para hacer penitencia. Los peregrinos, desde la antigüedad, hacían remisión de sus penas e incluso por otras personas”.
"Es muy importante que haya confesores"
El obispo de Astorga fue obispo auxiliar en Santiago y recuerda que “cuando se llega a Santiago de Compostela es muy importante que haya confesores porque la gente demanda confesiones. Cuando estaba allí sí que ejercí el ministerio de confesión y puedo decir que es increíble, todas las personas que confesé se emocionaban, lloraban, llevaban penas muy grandes”.
Mons. Fernández cree que hay “que pedirle al peregrino que sea como una esponja, dispuesto a absorber de todo. Las sensaciones son múltiples, por todos los sentidos, desde el olor de la hierba mojada del amanecer hasta la luz clara de esta tierra de Castilla y León, hasta el sonido de los pájaros. Lógicamente detrás de todo encontrarás el misterio de Dios”.
El obispo ya lleva un año en Astorga y asegura que este primer curso en la ciudad ha sido muy positivo: “Estoy muy contento, nada más llegar advertí una gran acogida por parte de los feligreses y sacerdotes de esta diòcesis. Hemos trabajado bastante con algunos proyectos que empezó el anterior obispo que falleció de forma repentina en mayo del año 2019”.
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Larga vida al Camino de Santiago
Sobre el Camino de Santiago, Mons. Fernández tiene claro que para la ciudad de Astorga “es muy importante. De hecho, todo este tiempo de pandemia ha afectado mucho la ciudad porque vive mucho del turismo y de la peregrinación y la pandemia ha afectado mucho”.
Y sobre el futuro del Camino de Santiago, el obispo de Astorga asegura que “seguirá creciendo, lo que sí se ha visto es una derivación hacia otros caminos. El Camino el Norte tiene mucha fuerza, también el Camino Portugués”. “Sí que hay una preocupación - afirma el obispo – y es el riesgo de cara al futuro es que se potencien otro tipo de motivaciones, que son legítimas, pero si se pierde la espiritual y la religiosa, el camino se agota. Cuando hay un aprovechamiento y vivencia espiritual eso te llena mucho más y va a dar una larga vida al Camino”.
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