Antonia Hidalgo, una vida entera dedicada a la asignatura de Religión: "Él nos pone en el camino"
Desde hace 35 años, profesora de Religión en la diócesis de Cádiz y Ceuta: "Los que al principio fue una prueba, hoy es mi vida"
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Antonia Hidalgo es, desde hace 35 años, maestra de Religión en la diócesis de Cádiz y Ceuta. Su vocación en la enseñanza católica fue más decisión de Dios que suya: “Él nos pone en el camino y eso hizo conmigo”. Así lo explica esta profesora que participa este 19 y 20 de noviembre en Granada, en el III Congreso del Profesorado de Religión Católica de Andalucía, titulado “Una asignatura para el s. XXI”.
El encuentro, organizado por la Secretaría Técnica de Enseñanza de los Obispos del Sur y las Delegaciones Diocesanas de Enseñanza de Andalucía, reunirá a más de 600 personas.
Este III Encuentro del Profesorado de Religión, viene a coger el testigo del celebrado en el 2014 en Sevilla: "Es un momento de estudio, formación y encuentro, para trabajar en la formación permanente de nuestro profesorado y contar con la presencia de auténticos expertos en la materia que iluminarán con su saber nuestro quehacer cotidiano", expresan los organizadores.
Una vida, una profesión
Antonia se mudó a Cádiz desde Córdoba cuando contrajo matrimonio con su esposo, y en uno de sus paseos acabó en el obispado de Cádiz y Ceuta preguntando por el área de enseñanza que la llevó a conocer a la hermana Carmen.“Lo que en un principio sería una transición se convirtió en mi vida, mi profesión”.
Ser profesora de religión implica muchas cosas, dedicación, preparación, ser ejemplo de vida por la tarea tan importante que, con la Misio, dan los Obispos año tras año, y como dice Antonia “Ser coherentes con las enseñanzas y prácticas de la fe cristiana. Para un profesor, el objetivo principal a cumplir con sus alumnos es darles otra visión de la vida en la que el egoísmo sea cambiado por generosidad, el odio por el amor, la despreocupación por la entrega a los demás… Y todo ello está en la Biblia, en los Evangelios. Y debe estar en nuestras vidas, en sus vidas…porque hemos creado entre todos una sociedad en la que priman valores tóxicos, y debería primar el respeto y el amor a los demás”.
¿Cómo influye la asignatura de Religión?
Desde la experiencia de Antonia, asegura que la asignatura de Religión influye positivamente en los niños que la eligen, “Los profesores de Religión hacemos todo lo posible por enganchar y crearles a los alumnos esa necesidad de indagar, investigar y sentir su fe y eso se traduce en su forma de vida y de tratar a los demás. Intentamos acercarnos a ellos de todas las formas posibles haciendo cursos, trabajando nuevas metodologías, recursos. El profesor de Religión es un superviviente y un luchador nato. Siempre hemos trabajado con ganas, ilusión y mucha fe”.
Entre las numerosas experiencias que cuenta Antonia, tras los 35 años que lleva dando servicio a la Iglesia con la vocación de la docencia, guarda en su corazón los te quiero de sus alumnos, los dibujos traídos desde sus casas, el respeto con la que la tratan sus compañeros, los cafés con antiguos alumnos y las peticiones de estos para ser madrina de Confirmación, el reconocimiento de las familias… “Tantas y tantas experiencias que te llenan el alma y el corazón, y que te hacen dar a gracias a Dios por haberme puesto en el camino".