Las diócesis se suman a los mensajes de cariño por la muerte del obispo de Gerona: "Recemos por su alma"
Francesc Pardo ha fallecido en la madrugada de este viernes a los 75 años de edad. El funeral tendrá lugar el lunes, 4 de abril
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Consternación en la Iglesia española tras conocer el fallecimiento del obispo de Gerona, Francesc Pardo, tras permanecer varias semanas ingresado en una clínica a raíz de una úlcera de estómago que le había producido una pérdida de sangre y le obligaba a guardar reposo. El funeral tendrá lugar el lunes, día 4 de abril, a las 11.30 horas en la Catedral.
Su bien talante y cercanía con las diócesis le hizo ser una figura muy querida. Por ello, los obispos y diócesis de toda España han lamentado esta pérdida. Uno de los primeros en mostrar el pésame por la muerte del titular de la diócesis de Gerona ha sido el arzobispo de Barcelona, el cardenal Omella, quien ha pedido a los fieles rezar por su alma.
Durante la mañana de este viernes, son muchas las diócesis y archidiócesis las que han rezado por el alma de Francesc Pardo, trasladando el pésame a sus allegados. Han sido los casos de Tarragona, Orihuela-Alicante, León o Ciudad Real, todos a través de sus respectivas cuentas de Twitter.
Así era Francesc Pardo
Era un hombre discreto, pero muy cercano a las personas y seguía con interés todos los eventos que sucedían en la ciudad, participando en algunos de ellos, sobre todo en los culturales y deportivos. Le encantaba la música, los deportes en general y especialmente el fútbol. En más de una ocasión explicó que de joven su padre le decía: “Los domingos no hay fútbol ni vermut sin antes ir a misa”.
Una de las declaraciones que más titulares consiguió el prelado fue a raíz de la carta pastoral escrita durante la pandemia de la covid-19 en la que afirmó que “no hay nada más pagano y anticristiano que considerar la epidemia como un castigo de Dios”.
Cada año por la fiesta patronal de san Narciso era esperada su homilía en la que siempre intentaba reflexionar sobre cuestiones actuales a la luz del Evangelio. Seguía la actualidad a través de la radio, de los periódicos y cuando el tiempo le permitía, algún programa de televisión.