El perfil de las víctimas de la trata: migrantes con formación y con más trastornos de salud

Las Hermanas Oblatas, que ha presentado su informe anual, atendió a un total de 7.970 mujeres en 2023, de las que un 80% fueron víctimas de la prostitución: "Los gobiernos tienen que impulsar medidas"

EFE

Redacción Religión

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Las Hermanas Oblatas atendieron en 2023 a un total de 7.970 mujeres víctimas de la trata a través de los diferentes proyectos que tiene la congregación en Europa, lo que supone un crecimiento del 34% respecto al año 2022. Así lo refleja el informe anual de Prostitución y Trata.

Del total de mujeres atendidas, el 80% estaban en situación de prostitución; el 2,27% son víctimas de trata identificadas por las fuerzas de seguridad del Estado; el 9,81% son posibles víctimas y el 7,97% son víctimas de otras violencias o están en situación de exclusión social.

Migrantes sin documentación, el perfil de las víctimas de la trata

El estudio recoge un aumento de las víctimas de origen colombiano, lo que obliga a las Oblatas a plantear un cambio de estrategia en la intervención: “Existe una gran diferencia entre éstas y el resto de nacionalidades, siguiendo la tendencia de crecimiento del año anterior, con un incremento de 53,19% más de mujeres atendidas”, ha indicado la Hermana Carmen Ortega, provincial de la Provincia Oblata Europa.

A su vez, alertan que se ha incrementado en más de un 20% los problemas de salud entre las víctimas atendidas por la congregación: “Presentan mayor deterioro en su estado de salud, tanto física como mental, en parte consecuencia del aumento de la violencia experimentada en el ejercicio de la prostitución, y en la etapa de captación y tránsito en el caso de las víctimas de trata; y en parte por los traumas experimentados a lo largo de vida”, ha subrayado Cristina Ramírez, responsable del Grupo de Trata en la Provincia Europa.

El abuso, el acoso sexual, la violencia de género, las agresiones, las amenazas y la explotación sexual, siguen siendo las principales violencias que experimentan estas mujeres. El perfil suele ser el de la mujer migrante sin documentación en situación de vulnerabilidad, con dependencias familiares en sus países de origen.

“Casi el 80% de las mismas se niega a interponer denuncia por miedo a represalias, así como a causa de su situación administrativa”, ha precisado Ramírez.

Las Oblatas piden a las administraciones más recursos

Pese a su situación de vulnerabilidad, se percibe una mayor formación entre las víctimas de la trata, por lo que la atención se centra más en la formación especializada y la orientación laboral. Respecto a 2021, en el 2023 se ha atendido un 91,25% más de mujeres en talleres, cursos formativos y proyectos de emprendimiento.

“Las principales necesidades y dificultades que presentan son las relacionadas con la atención social, las dificultades económicas y de acceso a una vivienda digna, la regularización de su situación administrativa, la búsqueda de empleo y la inserción sociolaboral”, ha indicado la Hermana Carmen Ortega.

El informe anual de Prostitución y Trata pone también el foco en la reducción de las ayudas estatales y autonómicas a los proyectos sociales de las Oblatas respecto a años anteriores, lo que supone que aumente la vulnerabilidad entre las mujeres, se dificulte la salida de estos contextos y se prolongue la atención para dar respuesta a sus necesidades.

“Se hace necesario que desde los gobiernos se impulsen medidas y propuestas legislativas globales e inclusivas con apoyo presupuestario que las garantice y mantenga en el tiempo, que den respuesta real a las necesidades de las mujeres, no se les revictimice, estén orientadas a restituir el daño de las víctimas y les permita el acceso real a derechos”, recalca Ortega.