Madrid y Oviedo, las ciudades en las que más de 80 conventos de España y Francia venderán sus dulces y productos navideños: "Hechos en oración"
Alejandra Salinas, directora de la Fundación Contemplare, explica que podemos encontrar hasta 900 variedades de productos, desde dulces navideños hasta cervezas artesanas
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Polvorones, mantecados, mazapanes, roscos de vino, turrones… Hasta 900 variedades de estos productos, y de muchos otros, son los que se pueden encontrar en la II Feria Monástica organizada por la Fundación Contemplare. Desde el 6 hasta el 15 de diciembre la Casa de la Panadería, situada en la Plaza Mayor, está acogiendo esta feria en la que más de 80 monasterios y conventos de España y, por primera vez, también de Francia, venden sus productos.
Alejandra Salinas, directora de la Fundación Contemplare, ha compartido con nosotros las novedades de este evento: "Además de los tradicionales polvorones, turrones y mantecados, ofrecemos productos salados como quesos, cervezas, patés y aceites, elaborados por los monjes en total silencio y oración". Y ha añadido que "cada uno de estos productos está hecho con una dedicación que no se encuentra en ningún otro lugar y el simple hecho de comprarlos contribuye al sostenimiento de estos monasterios, tan esenciales para preservar la vida contemplativa".
A lo largo de la feria, se puede descubrir una amplia variedad de productos monásticos, entre ellos las mermeladas, como la de fresa con pimienta o la de cereza al brandy, y licores y cervezas artesanas que sólo se encuentran en estos enclaves: "La gente se sorprende mucho con estos sabores tan peculiares y la calidad de los productos. Es como dar un paso atrás y saborear la tradición".
Sin embargo, la feria no se limita solo a la gastronomía. Este año se han sumado las tradicionales coronas de Adviento tejidas a mano, los nacimientos confeccionados en oración por las Hermanas de Belén, y un Niño Jesús muy especial de Charles de Foucauld, creado en el estilo oriental.
"conocer, agradecer, preservar y agradecer"
El propósito de estas ferias, según Salinas, va más allá de ofrecer productos exclusivos: "Nosotros queremos recordar y dar a conocer para mucha gente que no lo sabe que España es la primera potencia mundial en vida contemplativa y que eso es un patrimonio cultural y espiritual de nuestro país que tenemos que, primero conocer, después agradecer y, por último, preservar y proteger porque es una joyita muy grande. Esa gente que se retira del mundo para rezar por toda la humanidad y que elabora estos productos que están hechos en oración para cada persona que lo va a consumir".
Este año, el evento se extiende a varios puntos de Madrid y, también, por primera vez a la ciudad de Oviedo con ocho casetas de madera, del 5 al 22 de diciembre. También es posible realizar pedidos a través de su marketplace online.