La objeción de conciencia en el personal sanitario: "No es cuestión de religión, izquierdas ni derechas, es humanidad"

La Asociación Nacional para la Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia califica de "ideología pura y dura" la intención del Gobierno de señalar a los profesionales que no quieren participar en abortos o eutanasias

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

4 min lectura

La mayoría de abortos en España se practican en clínicas privadas, pero la ministra de Sanidad, Mónica García, quiere incrementarlos en los centros públicos e impulsar el registro de objetores de conciencia. Según García, en los próximos días impulsará un borrador para unificarlos en todo el país.

El Colegio de Médicos de Madrid explica que estos registros son discriminatorios e inconstitucionales, y recuerdan que estén o no en una lista todos los profesionales sanitarios tienen derecho a ejercer la objeción de conciencia cuando la práctica que se les impone es contraria a sus creencias o valores.

Una postura que ha secundado la presidenta de la Asociación Nacional para la Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia, Eva María Martín, quien en 'Ecclesia al día' considera que esta decisión del Gobierno busca “dar otra vuelta de tuerca en contra de la libertad porque la objeción de conciencia es libertad de conciencia, la llevamos en nuestro ser personal, va unido a nuestra dignidad como persona”.

"Los objetores de conciencia se ponen de parte del más débil"

Y es que como ha recalcado Eva María Martín, “la objeción de conciencia no es frívola”, y apunta que los profesionales que se niegan a practicar un aborto o la eutanasia “se pone de parte del más débil, porque el no nacido es el más pobre de los pobres porque ni siquiera le van a dejar vivir”.

La presidenta de la Asociación Nacional para la Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia ha continuado explicando que quienes se acogen a este derecho están a favor de la salud de la mujer, y tilda de “manipulación ideológica y política” quienes esgrimen que “hacemos política con el cuerpo de la mujer”.

De ahí que Martín califique en 'Ecclesia al día' de “antinatural” que una mujer “no deje vivir al hijo que tiene en sus entrañas va en contra de nuestra dignidad”.

Eva María Martín califica de "ideología pura y dura" las listas del Gobierno 

Por eso, para la farmacéutica no es concebible que los objetores de conciencia sean vistos “como los raritos, los que vamos en contra de la salud de la mujer, que somos de la ultraderecha... esto no es política, esto es ideología pura y dura. Por defender la vida no me pueden decir que soy una retrógrada y de ultraderechas. Están manipulando a todas las mujeres”, ha sostenido.

La presidenta de la asociación que defiende la objeción de conciencia también ha puesto el foco en la situación en la que quedan los profesionales que se niegan a estas prácticas, no solo por cuestiones religiosas, sino morales: “No es cuestión de religión, la Iglesia protege la dignidad del hombre, pero esto no es político, no es religioso, ni izquierdas y derechas, es cuestión de humanidad. La sociedad civil tiene que despertar y a las mujeres no nos pueden engañar. Muchos jóvenes con contratos precarios si se niegan a practicar un aborto pues le pueden apartar del servicio, o no va a ascender en el hospital”, ha lamentado.

" Se está intentando amedrentar a los objetores de conciencia"

Eva María Martín es objetora de conciencia desde hace más de tres décadas, apuntándose en el registro del Colegio de Farmacéuticos de Madrid, donde asegura sentirse amparada. De esta manera, la responsable de la asociación está a favor de que se lleve a cabo un registro de los objetores de conciencia, pero “con las debidas garantías”.

“Las listas que propone el Gobierno no me dan ninguna garantía, tengo certeza de que se van a convertir en listas negras. Abortar es matar, así de claro, es la realidad. A los profesionales sanitarios y farmacéuticos nos han educado y es nuestra vocación salvar vidas, y cuando no podemos salvar paliar el dolor, ayudar, pero nuestra vocación no es matar. Que se apunten los que quieren participar en los abortos y eutanasias”, ha señalado.

Cuestionada por la actitud que debe mostrar el sanitario o farmacéutico que quiera objetar, la recomendación de Eva María Martín es tratar de llegar a un entendimiento: “Mi consejo es llegar a un entendimiento respetando las libertades de las dos partes dentro del hospital o de la farmacia , donde se dan casos con la venta de la píldora poscoital. Lo que no se puede es lo que están intentando, que es amedrentar, asustar, en plan dictatorial. Es una ley que no voy a respetar porque va en contra de lo más profundo de mi ser. Es una ley que no hace mejor al hombre, que va en contra de la dignidad humana. Hará falta varias generaciones para que nos demos cuenta de que esto es una aberración”, ha vaticinado.