La Comunidad de Taizé invita a los jóvenes a participar en un Encuentro virtual a finales de agosto

La Comunidad de Taizé está viviendo un verano diferente a causa de la pandemia de la Covid-19. Cuando normalmente visitarían la Comunidad unos 2500 jóvenes cada semana durante los meses de verano, el número se ha visto reducido a causa de la pandemia. También los hermanos de la Comunidad han tenido que recurrir a los nuevos medios de comunicación disponibles para seguir retransmitiendo las oraciones en directo. Durante los meses de la pandemia la Comunidad retransmitió, a través de sus redes sociales, la oración de la tarde, alcanzando diariamente unas 6000 visualizaciones.

Además, durante la festividad de Pentecostés organizaron un fin de semana especial retransmitiendo a través de YouTube y redes sociales algunos talleres y reflexiones bíblicas. Los jóvenes se podían además encontrar en plataformas digitales para compartir su experiencia y sus preocupaciones con gente de otros países.

Una propuesta para reunirse con otros jóvenes de varios países

Después de esta primera reunión, la Comunidad propone un segundo encuentro online para el ultimo fin de semana de agosto, del viernes 28 al domingo 30. Este encuentro está centrado especialmente en los temas de las Propuestas del Hermano Alois, prior de la comunidad, para el año 2020, “Siempre en camino, nunca desarraigados”. Este fin de semana además contará con varias propuestas como talleres y reflexiones bíblicas.

Ya a partir del viernes por la tarde habrá un primer contacto con los pequeños grupos virtuales y a partir de las 20:30 una oración en directo desde Taizé, retransmitida por redes sociales, con unas palabras de acogida del prior al inicio. A partir del sábado empezará el encuentro con una reflexión bíblica de un Hermano de la Comunidad para seguir con los intercambios en los grupos virtuales. Por la tarde se realizarán algunos talleres y, a las 20:30, la oración de la tarde seguida por un encuentro con el Hermano Alois. El domingo por la mañana se pide a los participantes del encuentro ir a celebrar la Eucaristía en sus propias parroquias y el día continua con los intercambios en los grupos virtuales y la oración de la tarde.

Este encuentro está pensado para jóvenes entre 18 y 35 años y es una posibilidad para compartir, desde sus hogares, alegrías y preocupaciones de cara al futuro. Los adultos, mayores de 35 años, también se pueden organizar para formar grupos entre ellos. Las reflexiones bíblicas y los talleres estarán disponibles para todos.

Antes de inscribirse, los jóvenes de 18 a 35 años se tienen que inscribir utilizando este formulario online y la fecha limite es este domingo, 23 de agosto.

Un verano atípico con dos aniversarios muy importantes

La Comunidad vive este verano atípico celebrando además dos aniversarios muy importantes. Se conmemoran 15 años de la muerte de su fundador, el Hermano Roger, y 80 años de la fundación de la Comunidad. Hace unos días el Hermano Charles Eugene dio una entrevista a Vatican News afirmando que la herencia más grande que le dejó el Hermano Roger, es quizás “su llamada a hacer con coraje, con perseverancia, hombres y mujeres de paz y de reconciliación a pesar de todo lo que puede pasar”.

“La cosa un poco extraordinaria – precisa el Hermano Eugene – es que su muerte violenta se transformó desde el día siguiente en una luz que iluminó su vida, se habló de su muerte, pero no solamente de su muerte, sino que también de su vida y de su mensaje en todo el mundo en ese momento y es así cómo se hizo salir su llamada a la paz y la reconciliación”.

Asimismo, el Hermano Charles Eugene recordó que, el Hermano Roger vivió su búsqueda por la unidad de los cristianos y la unidad de los hombres sobre todo a través de signos, “él hablaba, por ejemplo, de la importancia de anticipar la reconciliación”.

El Hermano Roger, fundador de la Comunidad Ecuménica de Taizé​

Hermano Roger, fue el fundador de la Comunidad Ecuménica de Taizé. Roger Louis Schutz nació el 12 de mayo de 1915 en Provenza, un país de la Suiza francófona. Hijo de un pastor protestante y biblista, el joven Roger, se graduó en Literatura y en Teología en Lausana. En 1940, Roger dejó su familia movido por el deseo de construir una “vida de comunidad en la que la reconciliación según el Evangelio, sería vivida en una realidad concreta” y se dirigió al país natal de su madre, Francia. En bicicleta, en el mes de agosto, llegó a Taizé, una aldea de la región de Borgoña y allí tuvo la intuición de fundar una Comunidad que pudiera ofrecer una forma de fraternizar entre las personas, que la guerra y las religiones a menudo habían dividido dramáticamente. Así, en plena Segunda Guerra Mundial, empezaron a llegar a Taizé refugiados de todo el mundo, muchos judíos, y sobre todo jóvenes atraídos por la espiritualidad del fundador.