La Iglesia en Siria pide ayuda: “Estamos viviendo una situación de verdadera angustia”

Ayuda a la Iglesia Necesitada lanza una campaña de emergencia para "poder ayudar a la Iglesia en Siria para que pueda atender a las familias en sus necesidades básicas"

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Redacción Religión

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“Estamos viviendo una situación de verdadera angustia. Este terremoto está provocando una desesperación todavía mayor que la que ya existía. Además de la falta de comida y del durísimo invierno, del frío y la nieve, ahora la gente no tiene un techo, su casa está destruida por el terremoto”, con estas palabras se ha expresado el arzobispo de Homs, Jean Abdo Arbach, en declaraciones a Ayuda a la Iglesia Necesitada, quienes han lanzado una campaña de emergencia para sumar ayudas ante esta terrible situación.

La Iglesia en Siria ha confirmado que hay víctimas mortales y heridos entre las comunidades cristianas de allí y que la situación es de “desesperación absoluta”, porque con este seísmo llueve sobre mojado: más de una década de guerra, persecución y, más recientemente, la agobiante crisis financiera que está viviendo la población siria.

Las ciudades de Homs, Alepo, Latakia y Hama, de importante presencia cristiana, se han visto gravemente afectadas por el terremoto que en la madrugada del 6 de febrero, sacudió el sur de Turquía y el norte de Siria. En ambos países hay miles de fallecidos y heridos, personas atrapadas entre los escombros y las cifras siguen aumentando a medida que pasan las horas. Los supervivientes necesitan ayuda urgente y de ahí nace esta campaña de Ayuda a la Iglesia Necesitada.

La Iglesia pide "ayuda urgente”

para auxiliar a la población que se ha quedado sin hogar en cuestión de segundos y acuden a las parroquias, monasterios, a las escuelas y a los hospitales donde están siendo acogidos. Mucha gente pasa la noche en coches e incluso en la calle.

Un equipo de

se ha desplazado a Siria para analizar sobre el terreno las necesidades más urgentes y ha abierto de inmediato un fondo de emergencia para poder proporcionarles comida, leche para los niños, agua, mantas, sacos de dormir y ropa de abrigo.