La Iglesia europea exige la "inmediata liberación" de sacerdotes y laicos privados de libertad en Nicaragua

La Comisión de Conferencias episcopales de la Unión Europea (COMECE) contempla con tristeza y preocupación la persecución que la Iglesia Católica sufre en Nicaragua, y que se han intensificado por parte del Gobierno de Daniel Ortega desde el pasado verano.

En el comunicado, han mostrado especial preocupación por la situación que vive el obispo Rolando Álvarez, así como los sacerdotes Ramiro Tijerino, José Luis Díaz y Sadiel Eugarrios, el diácono Raúl Vega González, los seminaristas Darvin Leiva Mendoza y Melkin Centeno, y el camarógrafo Sergio Cárdenas, víctimas todos ellos de acusaciones falsas y condenados esta semana a diez años de prisión por los delitos de "traición a la patria”.

Todos ellos, junto al obispo Rolando Álvarez, fueron detenidos la madrugada del viernes 19 de agosto por agentes policiales en el palacio episcopal de la diócesis de Matagalpa, después de haber estado quince días confinados, y desde entonces se encuentran en la cárcel policial "El Chipote", oficialmente conocida como la Dirección de Auxilio Judicial, con excepción del obispo que se encuentra bajo "resguardo domiciliar".

“Los últimos acontecimientos, incluidos los cierres de emisoras de radio católicas, las obstrucciones policiales para acceder a las iglesias y otros actos graves que perturban la libertad religiosa y el orden social justo muestran el agravamiento de una situación iniciada años atrás”, recuerda la COMECE.

"Exigimos su inmediata liberación"

Pese a esta dura situación por la que atraviesa la Iglesia nicaragüense, las conferencias episcopales de la UE han exaltado “los testimonios de compromiso con nuestra fe en el Evangelio y el bien común social de nuestra amada Iglesia en Nicaragua. Su fidelidad al mensaje de Nuestro Señor Jesucristo y su entrega por el bien del prójimo es un vivo ejemplo y modelo a seguir en tantas otras situaciones de persecución que, desgraciadamente, se multiplican por diversas partes del mundo”, aseguran en la nota de prensa.

Así las cosas, la COMECE se han unido a las voces que “claman por la injusticia a la que están siendo sometidos nuestros hermanos en Nicaragua y exigimos su inmediata liberación”.

Asimismo, la comisión europea de conferencias episcopales expresan que harán “lo que está en nuestra mano ante las Instituciones Europeas para su liberación y para que se promueva la libertad, el estado de derecho, la justicia y la democracia en su amado país”.