Trabajos dignos y reparto justo de los beneficios: las demandas del Vaticano a las operadoras turísticas

Con motivo del Día Mundial del Turismo que se celebra este martes, la Santa Sede demanda al sector en un comunicado contribuir a la reconstrucción de un mundo más justo

Trabajos dignos y reparto justo de los beneficios: las demandas del Vaticano a las operadoras turísticas

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

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Este martes, 27 de septiembre, es el Día Mundial del Turismo que se celebra bajo el lema 'Repensar el turismo'. Tras dos años en los que el sector se ha visto muy afectado por la pandemia, ahora vuelve a verse como el salvoconducto para la economía de numerosos países, entre ellos España.

En este sentido, el Vaticano asegura que el turismo puede convertirse ahora en uno de los motores de la reconstrucción de un mundo “más justo, sostenible e integral”, se puede leer en el comunicado emitido este martes.

En la nota de prensa, la Santa Sede asegura que la reactivación turística debe inspirarse en el 'Código Ético Mundial para el Turismo', que concibe esta actividad “como una fuerza viva al servicio de la paz y un factor de amistad y comprensión entre los pueblos, un factor de desarrollo sostenible, un factor de aprovechamiento y enriquecimiento del patrimonio cultural de la humanidad, una actividad beneficiosa para los países y las comunidades de destino”, subraya.

Un turismo con empleos dignos y reparto de los beneficios

Bajo estas premisas, el Vaticano considera necesario un cambio de rumbo en el sector, que contribuya a reducir las desigualdades e injusticias generadas durante la crisis. Una reducción de la brecha que, la Santa Sede, cree que puede lograrse “respetando los derechos laborales de quienes trabajan en el sector, a todos los niveles y en todos los países, y cuando el turismo mismo, como actividad de ocio y de recreo, se desarrolla respetando plenamente los derechos fundamentales y la dignidad de las personas”.

Asimismo, demanda en el comunicado que los beneficios obtenidos por las empresas de su actividad turística,sean repartidos de manera equitativa, “superando una lógica depredadora, sobre todo en lo que respecta a las poblaciones y zonas geográficas especialmente afectadas por las múltiples crisis que afligen al mundo contemporáneo”, puntualiza.

En este sentido, el comunicado lamenta que aún existen operadores turísticos que operan “en condiciones de precariedad e ilegalidad, con salarios injustos, obligados a un duro trabajo, a menudo lejos de la familia, con alto riesgo de estrés y sometidos a las reglas de una competitividad agresiva”.

Un turismo más sostenible

La Santa Sede ha recordado también que el turismo tiene impacto sobre el medio ambiente. En este sentido, recomiendan a los turistas apostar por un turismo de proximidad como consecuencia de la pandemia y la actual crisis energética: “Saber mirar a nuestro alrededor, reconocer y apreciar los tesoros del patrimonio, la gastronomía, el folclore e incluso la espiritualidad que las regiones vecinas tienen para compartir. Hoy día, las políticas locales pueden replantearse profundamente, en términos de hospitalidad y calidad de vida para los habitantes históricos, los recién llegados y los vecinos más inmediatos”, expone.

Al hilo de esta idea, el boletín vaticano hace hincapié en que la contaminación no es el único medidor de turismo sostenible, ya que “se necesita una sensibilidad que amplíe la protección de los ecosistemas de una forma concreta, para garantizar un paso armonioso de los turistas por entornos que no les pertenecen, como tampoco pertenecen a una única generación”.

VIII Congreso Mundial de Pastoral del Turismo en Santiago de Compostela

Para concluir, el Vaticano ha remarcado que la Iglesia tiene interés “en promover esta visión renovada del turismo, desde la perspectiva del desarrollo humano integral. El proceso sinodal, que se está viviendo en todo el mundo, desde las comunidades más periféricas hasta los más importantes centros de decisión, representa una metodología de escucha y de participación, que también puede aportar a la sociedad civil y a las organizaciones económicas una mayor capacidad de composición de intereses y puntos de vista contrapuestos. El arte del discernimiento y la capacidad colectiva de llegar a nuevas síntesis, representan desafíos históricos, de los que depende un futuro a escala humana para todos”, apunta.

En este sentido, recuerda que del 5 al 8 de octubre se celebra en Santiago de Compostela el VIII Congreso Mundial de Pastoral del Turismo bajo el lema 'Turismo y Peregrinación: Caminos de Esperanza' para reflexionar y ahondar en este turismo más justo y sostenible.