Los obispos españoles: "Quedará para siempre en nuestro corazón la cercanía de Benedicto XVI con nuestro país"

"Querido Benedicto XVI, le recordaremos siempre". Son las palabras que más se repiten en las rede sociales de las diócesis y de los obispos españoles, que se unen a ese sentimiento de gratitud por su magisterio y muestra de condolencia por el fallecimiento de Benedicto XVI. De hecho, las campanas de diferentes templos de España, como la catedral de la Almudena, la de Plasencia o las iglesias de Cartagena, han tocado a difunto este sábado 31 de diciembre para anunciar la muerte del Papa emérito.

"Benedicto XVI ha emprendido el camino hacia la vida eterna. Demos gracias por su magisterio y su testimonio de vida. Pidamos a Dios que lo acoja en sus brazos misericordiosos", ha señalado el presidente de la Conferencia Episcopal Española y cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, en un mensaje en Twitter.

A este agradecimiento se ha sumado el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, quien ha destacado cómo Ratzinger "tuvo pasión por la verdad, claridad en la transmisión de la fe y un profundo amor a la Iglesia".

Testimonio de amor y servicio

Los obispos también han puesto de relieve su "testimonio de fe, esperanza, amor y servicio". "Quedas para siempre grabado en lo más profundo de nuestro corazón", ha subrayado el arzobispo de Burgos, Mario Iceta.

Por su parte, el arzobispo de Granada José María Gil Tamayo ha expresado su "dolor" y ha ensalzado "el gran servicio a la Iglesia de este pontífice sabio y santo" y ha anunciado que la diócesis celebrará en la catedral una misa exequial por el alma de Benedicto XVI el 3 de enero a las 19:30 horas. Su fecundo magisterio, según ha enfatizado la diócesis, será "un faro para tiempos de oscuridad".

El arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, ha destacado que lo que mejor identifica al Papa emérito Benedicto XVI “es su pontificado enmarcado en dos declaraciones suyas: la que hizo el día de su elección en la sede de Pedro, presentándose ante el mundo como “un humilde trabajador de la viña del Señor”, y el día en que se hizo efectiva su renuncia a la Sede Pontificia, en el balcón del Palacio apostólico de Castelgandolfo, donde se presentó diciendo: “Solo soy un peregrino que inicia la última etapa de su peregrinaje en la tierra”.

Para el arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, Benedicto XVI "ha mostrado que Dios es amor, luz para caminar en la fe, esperanza y caridad"; y para el arzobispo de Santiago de Compostela, Julián Barrio, se ha convertido en un "referente ético y moral para todo el mundo".

“Benedicto XVI sabía que al renunciar al pontificado iba a ser interpretado desde puntos de vista diferentes y sin embargo, él ve que no está ya en condiciones de seguir al frente", ha expresado el obispo de Getafe, Ginés García Beltrán.

Igualmente, el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, ha destacado que fue un "cooperador de la verdad siempre", un "Papa sabio, sencillo y bueno" que deja un "legado precioso"; un pontífice que, según añade el obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza Boy, "dialogó abiertamente con la cultura secularizada"; y que, según el obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, fue "la voz que clama en el desierto ante la dictadura del relativismo".

, obispo de San Sebastión, ha deseado "que descanse en paz" el Papa emérito, al que ha definido como "grande entre los grandes". "Nos enseñó a poner a Cristo en el centro de la vida, a servir siempre y sin miedo a la verdad, a tender puentes de diálogo", ha abundado el arzobispo de Sevilla,

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Por todo ello, los obispos españoles se encuentran ahora rezando por el descanso del Papa emérito. "¡Cuánto sentimos la muerte del Papa emérito, Benedicto XVI! Nos queda la oración ante Dios misericordioso. Pido a los sacerdotes celebrar cinco misas y toquen a difunto en las iglesias. Todos estamos llamados a la oración y a la acción de gracias a Dios por el regalo de su ministerio", ha subrayado el obispo de Cartagena, José Manuel Lorca.

El obispo de León, Luis Ángel de las Heras, "por sus palabras de extraordinaria luz sobre la fe, la esperanza y el amor"; el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, por ser un "servidor bueno y fiel", y el obispo de Vitoria, Juan Carlos Elizalde, "por su vida dedicada al Evangelio, a la Iglesia y al mundo, hasta el final". "El Señor te tome de la mano y te acompañe ante el Padre", le desea el obispo de Lugo, Alfonso Carrasco. La diócesis de Zamora, por su parte, ha anunciado que el obispo Fernando Valera, presidirá la Misa en sufragio por Benedicto XVI, el próximo día 4 de enero.