El Papa Francisco visita por sorpresa y de forma privada los restos de Santa Mónica
Ha ocurrido en la Basílica de San Agustín donde el Pontífice ha rezado y saludado a los frailes, monjas y peregrinos que estaban allí
El Papa Francisco visita la Basílica de San Agustín, Roma
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El Papa Francisco ha visitado de forma sorpresa y privada el pasado martes 27 de agosto, en el día de Santa Mónica, la basílica de San Agustín, en el centro de Roma de estilo arquitéctonico del renacimiento romano. Allí, pudo rezar en la capilla en la que se encuentran los restos de Santa Mónica y posteriormente se detuvo frente a una imagen de la Virgen para rezarle también, así lo contó la Santa Sede. Los frailes, monjas y peregrinos que estaban allí pudieron saludar al pontífice.
El Santuario se trata de un lugar que está dedicado a San Agustín de Hipona y donde se encuentran también los restos de Santa Mónica que el Póntifice visitó. De esta iglesia madre surgió la Orden de San Agustín en torno al 1286 d.C. sobre las bases de otra iglesia. Algunas de las obras de los artistas con más prestigio se encuentran en el interior del Santuario, por ejemplo Caravaggio, Rafael o Guercino.