El mensaje del Papa Francisco a Marruecos tras confirmarse la muerte de Rayan en el pozo: "Lo intentaron todo"

La triste noticia nos llegó a última hora de este sábado desde Marruecos. El pequeño Rayan, de cinco años, fue rescatado sin vida del pozo en el que había permanecido en los últimos cinco días, a 32 metros de profundidad.

Todo el pueblo marroquí se ha volcado con la tragedia de esta familia. La esperanza de rescatar al menor con vida dio paso a un triste desenlace, que en nuestro país nos retrotrae a enero de 2019, cuando el pequeño Julen fallecía en parecidas circunstancias.

El drama comenzó sobre las 14h del martes 1 de febrero. Fue en ese momento cuando ocurrió la desgracia. Primero, al no encontrarle, toda la familia se movilizó en la búsqueda hasta que, finalmente se dieron cuenta de que el niño había caído fatalmente al pozo.

Los expertos realizaron un túnel horizontal para llegar hasta Rayan, primero en vertical junto al pozo hasta llegar a sus 32 metros de profundidad. Para excavarlo trabajaron dos equipos que se iban alternando. Hasta el lugar se desplazó un helicóptero de la Gendarmería Real así como una ambulancia equipada.

Tras un primer intento fallido de rescate a través del pozo por el que cayó en niño, se optó por perforar un pozo paralelo y luego acceder al lugar donde se encuentra el niño. El viernes se informó de que la cámara introducida en el pozo detectó movimiento, por lo que se creía que Rayan seguía vivo. Una esperanza que, por degracia, se desvaneció en la noche de este sábado.

El apoyo del Papa Francisco al pueblo de Marruecos

Las muestras de apoyo a la familia y al pueblo de Marruecos se han sucedido en los últimos días a través de las redes sociales o de mensajes por parte de instituciones y gobiernos. El último en hacerlo ha sido el Papa Francisco en el Ángelus de este domingo, 6 de febrero.

En la Plaza de San Pedro, el Santo Padre no ha querido dejar pasar la ocasión para reivindicar la unidad de todo un pueblo para aferrarse y salvar al pequeño Rayan: “Todo el pueblo trabajando para salvar a un niño. Lo intentaron todo. Lamentablemente no lo lograron, pero es un ejemplo que leí en el mensajero (el periódico), la fotografía de ese pueblo esperando, en espera de salvar a un niño. Gracias a ese pueblo por ese testimonio”, expresaba el obispo de Roma durante el Ángelus, suscitando el aplauso de los presentes en San Pedro.